“Miente, miente, que algo quedará”


Esta famosa frase de Joseph Goebbels, jefe de la propaganda nazi del Tercer Reich, bien podría aplicarse al discurso que el presidente Luis Arce y los militantes del Movimiento al Socialismo (MAS) repiten y pretenden posicionar en la mente del pueblo boliviano, a que lo sucedido en octubre del 2019 fue un golpe de estado y no así una sucesión constitucional, ante la renuncia y  la huida de Evo Morales.

Es de tal magnitud la mentira, que el Presidente Arce al parecer olvida que fue él mismo quien reconoció al gobierno transitorio como constitucional, aparte de la existencia de una Declaración del Tribunal Constitucional que respalda dicha sucesión y de una Ley de Convocatoria a las Elecciones con la cual lo eligieron presidente el 18 de octubre de este año, en este caso bien podríamos decirle “ama llulla”, no seas mentiroso en idioma quechua.



Pero, mientras más intentan posicionar su mentira, queda en la mente del ciudadano boliviano los recuerdos de una actitud violenta de los masistas generada por el fraude electoral que Evo Morales ejecutó el 20 de octubre del 2019. Los 21 días de la revolución de las “pititas” y del movimiento cívico en todo el país reflejan claramente que el abuso de poder y el desconocimiento de la voluntad popular expresada en las urnas ya no podía ser tolerado, lo había dicho el libertador Simón Bolívar: “Nada es tan peligroso como dejar permanecer largo tiempo a un mismo ciudadano en el poder. El pueblo se acostumbra a obedecerle y él a mandarlo, de donde se originan la usurpación y la tiranía”; y así fue, el pueblo boliviano desenmascaró el fraude y Morales huyó del país.

Mientras más mienten, más se enredan en su madeja, olvidan que la Organización de Estados Americanos (OEA) y otros organismos internacionales comprobaron que sí hubo fraude electoral en Bolivia. Lo dijo, Luis Almagro: “No se le puede pedir a un pueblo que se deje robar una elección, no se le puede pedir a un pueblo que se deje robar la soberanía”, ¿entonces de qué golpe habla Luis Arce y el MAS? ¿Acaso, más bien no constituye un golpe a la democracia el querer perpetuarse en el poder torciendo la Constitución Política del Estado y las normas vigentes para eternizarse en el poder? ¿Copar todos los Órganos del Estado y ponerlos a su servicio sin respetar su independencia? ¿Servirse de los pueblos indígenas como bandera de campaña y luego olvidarlos y dedicarse ellos al vivir bien?

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Por tanto, la retórica del golpe de estado no tiene fundamento legal menos legitimidad y termina siendo un discurso pálido de lo que en realidad pasó, el mismo constituye más bien un pretexto para judicializar la política nuevamente y perseguir a los líderes, que representaron la voz del pueblo boliviano, así como a los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Boliviana que solo cumplieron su rol constitucional. Vemos nuevamente, que el Órgano Judicial se ha puesto al servicio del partido político de turno, que busca o inventa los motivos para encarcelar al opositor político y libera a los allegados del MAS que cometieron delitos de fraude electoral.

Sin embargo, a estas alturas del tiempo y trascurrido poco más de un año de aquellos sucesos, en los cuales el pueblo boliviano luchó para desterrar la tiranía y restituir la democracia, esperamos que la verdad prime y que la justicia obre en consecuencia, con total imparcialidad, dejando de someterse al poder político de turno y reivindique lo que el pueblo boliviano expresó en las calles. Seguiremos en la lucha y en el camino que Jesús nos enseñó cuando nos dijo: “la verdad os hará libres”.

Dr. Henry Omar Montero Mendoza – Senador por Santa Cruz