El Ejecutivo dispuso el cierre de fronteras por siete días, pero permitirá el paso de productos por tres horas diarias. Las medidas fueron aprobadas por decreto.
Luis Escóbar
Desde hoy y hasta el siguiente viernes, las fronteras con Brasil quedarán cerradas. La medida fue aprobada por el Gobierno a través del Decreto Supremo 4481 que -además- permite el tránsito entre ambos países sólo por tres horas diarias durante ese tiempo. Las autoridades de Pando y Beni ven perjuicio en la medida, mientras que Santa Cruz respalda la acción porque reducirá el riesgo de propagación de la nueva variante de la Covid-19.
“Este decreto tiene por objeto establecer medidas de vigilancia epidemiológica para los viajeros provenientes del exterior (…) orientadas a mitigar los riesgos asociados al ingreso de nuevas variantes de Sars-Cov2, causante de la Covid-19, además prioriza la vacunación y dispone el cierre temporal de fronteras con Brasil”, dijo ayer el ministro de Salud, Jeyson Auza.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
El pedido del cierre de las fronteras se hizo hace dos semanas por la Gobernación cruceña con la finalidad de reducir el riesgo de propagación de la nueva variante de la Covid- 19 que se originó en Brasil. Esta nueva cepa tiene la capacidad de ser más contagiosa y atacar a personas más jóvenes, quienes son derivadas, en pocos días, a terapia intensiva.
La norma establece, además, que los viajeros provenientes del exterior y mayores de cinco años deben presentar “con carácter obligatorio” la prueba RT-PCR negativa hasta 72 horas antes de su embarque en el país de origen para personas nacionales o extranjeras provenientes del exterior del país por vía aérea y 72 horas antes de su ingreso a Bolivia para personas nacionales o extranjeras vía terrestre, fluvial o lacustre.
Los viajeros deberán cumplir con el aislamiento al menos por diez días luego de su ingreso a territorio boliviano, que será controlado y monitoreado de acuerdo con la normativa vigente del Ministerio de Salud. Además, deben realizar la prueba RT-PCR al séptimo día de aislamiento. El costo del estudio será cancelado por el propio pasajero.
La alcaldesa de Guayaramerín, Helen Gorayeb, indicó a Página Siete que la norma es un perjuicio para la economía de esta población fronteriza. “Es necesario el cierre, pero no estamos de acuerdo por el tema de que nuestro municipio es una ciudad fronteriza que sólo vive del comercio. La verdad afectará mucho aunque sea una semana”, afirmó.
Pese a ello, la alcaldesa dijo que se cumplirá la norma “de forma disciplinada”, aunque las tres horas de paso “no sean suficientes”. “La población reconoció que debemos cuidar la salud y la vida. Cuando me llegó la norma me reuní con todos los sectores sociales y acordemos que se habilitará el paso de 8:30 a 11:30”, aseguró Gorayeb.
La alcaldesa está preocupada porque su municipio es muy dependiente de Brasil en la provisión de alimentos, vestimenta, insumos para el hogar y hasta para la ganadería.
La gobernadora de Pando, Paola Terrazas, informó que luego de una reunión del COED se consideró que “no se debería tener el cierre”. “Tenemos una frontera diferente. Decidimos –después de una reunión binacional- que haríamos acciones en conjunto porque somos muy cercanos y sería lo más conveniente trabajar entre todos para evitar el contagio y que los casos sigan subiendo”, afirmó la autoridad.
Terrazas dijo que “no pueden desobedecer” una norma nacional, pero aseguró que son interdependientes de los estados brasileños vecinos. “Nos abastecemos, en su mayoría, de alimentos. Una semana no nos perjudicará porque es cuestión de ajustarnos, acomodarnos y abastecernos. Lo que nos preocupa es la ley de reciprocidad y que Brasil adopte la medida”, afirmó.
Por ejemplo, según Terrazas, el año pasado se registró un cierre de fronteras en el gobierno de Jeanine Añez. Entonces, Brasil, por reciprocidad, cerró las pasos por cuatro meses. “En ese tiempo sufrimos por la especulación de precios de los alimentos que entraban por contrabando. Además, recibimos el combustible de La Paz, pero (los vehículos) deben atravesar Perú y Brasil para llegar a Cobija. Ojalá que no pase de una semana”, aseguró.
El director del Sedes de Santa Cruz, Marcelo Ríos, dijo que esta norma fue solicitada hace dos semanas. “Verificamos que el decreto dice cierre por siete días, aunque la recomendación epidemiológica es mayor. Nosotros siempre pedimos que sea de 14 días por el periodo de incubación y transmisión que se tiene del virus”, explicó.
La autoridad local indicó además que su mayor preocupación es continuar con el plan de vacunación.