El religioso deberá cumplir detención preventiva por tres meses en el penal de Morros Blancos en Tarija, por determinación de la Justicia boliviana.
El párroco Milton Murillo a su salida de dependencias policiales. Foto: APG.
Este jueves, Milton Murillo se convirtió en el primer sacerdote acusado de delitos sexuales en ser enviado a la cárcel con detención preventiva, por determinación de la Justicia, que decidió su presidio en el penal de Morros Blancos por tres meses.
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“Después de más de cuatro horas de audiencia de medidas cautelares, haciendo una valoración de todos los elementos aportados y presentados por el Ministerio Público, se ha dado una detención preventiva de tres meses a cumplirse en el penal de Morros Blancos al párroco Milton”, informó la fiscal departamental de Tarija, Sandra Gutiérrez.
Murillo quedó aprehendido el miércoles, en un operativo realizado por la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC). Para este jueves se fijó la audiencia de medidas cautelares, en la que enfrentó a la Justicia acusado de delitos sexuales, finalmente se vio pertinente su ingreso a la cárcel con detención preventiva.
“Con esto queremos decir que el Ministerio Público está trabajando, aplicando mano dura a estos hechos que están siendo denunciados”, afirmó Gutiérrez.
MILTON MURILLO
Otra de las determinaciones judiciales es que el caso permanezca en reserva por al menos cinco días más. Esto con la finalidad de precautelar el avance de las investigaciones y la protección a las víctimas; quienes, de manera preliminar, se conoce fueron seminaristas.
El sindicado enfrentó una audiencia cautelar de forma virtual, desde dependencias policiales. En tanto, en la puerta un grupo de personas hacía vigilia con velas, entre ellas se veía a religiosas. A su salida hacia el penal, los movilizados entonaron cánticos.
Murillo fungía como párroco en la iglesia de San Roque, de Tarija y es acusado de abusos sexuales. Gutiérrez confirmó que existe otro religioso investigado y que la Fiscalía está abierta en recibir más denuncias para esclarecer estos hechos. Uno de los casos pendientes es el del padre “Coco”, por el cual se aguarda identificar a las víctimas.
Si bien este es el primer sacerdote que cumplirá detención preventiva, no es el único investigado. Uno de los principales casos y por el cual se destaparon otros hechos como el de este párroco es el del fallecido sacerdote español jesuita Alfonso Pedrajas; quien en su diario admitió al menos 85 violaciones en su paso por centros educativos, la mayoría en el Juan XXIII de Cochabamba.
Aunque Pedrajas falleció, se investiga un posible encubrimiento de otros integrantes de la Compañía de Jesús. Por esto, la Fiscalía realizó ya el secuestro de documentación en allanamientos a la sede en La Paz de la congregación y en el colegio San Calixto de esta ciudad.
Hasta la fecha, el Ministerio Público reportó denuncias que involucran a religiosos en La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Tarija. Asimismo, la Delegación Defensorial de Chuquisaca informó que recibió una denuncia similar.
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