¿Perú podría pedir a Interpol que capture a Evo tras su negativa a declarar ante la Fiscalía? Responde un excanciller de ese país


El excanciller peruano Luis Gonzales Posada asegura que en su país están “cansados y hartos” con el expresidente boliviano Evo Morales.

Edwin Condori



La Fiscalía de Perú citó por segunda vez al expresidente boliviano Evo Morales para que declare este 10 de mayo por un presunto “plan separatista”, pero adelantó que no asistirá, por lo que su situación jurídica se podría agravar.

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«Evo Morales se presentará ante cualquier autoridad peruana cuando exista un gobierno democrático legal, legítimo y respetuoso de la vida; cuando exista una justicia liberada de la opresión externa; cuando gobierne el pueblo humilde y trabajador y cuando el pueblo peruano recupere su soberanía de manos extranjeras», publicó en su cuenta de Twitter, el 27 de abril de este año, el también líder cocalero.

El excanciller de Perú Luis Gonzales Posada, en una entrevista con El Deber Radio, ratificó que Morales, incluso, podría ser detenido donde esté en caso de que no se vuelva a presentar tras una inminente tercera convocatoria a declarar.

Si no viene será alertada Interpol, con alerta roja, para que lo detengan donde esté y si llega a Perú, si pisa la frontera, será inmediatamente aprehendido por las autoridades policiales y judiciales, y luego llevado a un proceso”, dijo.

La Fiscalía de Perú investiga la presunta existencia de un “plan separatista” en Puno y Morales está vinculado a ese proceso, precisamente, acusado de atentar contra la integridad territorial peruana.

El exmandatario, inicialmente, fue citado a declarar el 7 de marzo, pero no se presentó, por lo que otra vez fue convocado para este 10 de mayo.

El 27 de abril, Morales aseguró que se presentará a declarar ante cualquier autoridad peruana, pero recién cuando haya otro gobierno “legítimo” y “cuando exista una justicia liberada de la opresión externa”.

El caso que se investiga en Puno está relacionado a la crisis social y política que estalló en Perú entre diciembre y enero pasado luego de la destitución de Pedro Castillo de la Presidencia del vecino país.

Estamos realmente cansados de que esta persona (Morales) afecte la relación extraordinaria entre dos países hermanos, como Perú y Bolivia (…); estamos hartos que este hombre socave esa relación y la afecte desde todo punto de vista”, agregó el excanciller peruano.

Por tanto, en su criterio, “esta gente tiene que ser parada en seco”.  Además, “decirle a Bolivia que mientras Evo Morales esté dando vueltas y utilizando a los indígenas a favor de su causa y de la violencia, no habrá camino democrático que se pueda expandir con las garantías constituciones que corresponde a un estado de derecho”, sostuvo.

Asimismo, recordó que Morales, durante el gobierno de Pedro Castillo, llegó en varias oportunidades a Perú e incluso, según su versión, “fue recibido con alfombra roja”.

En esas visitas “dijo que apoyaba la nacionalización de hidrocarburos, la legalización de la producción de la hoja de coca, la expulsión de la DEA del territorio nacional y la convocatoria a asamblea constituyente», detalló.

«Él agitó y agitó, se desplazaba por las calles y plazas, hasta que finalmente, sintiéndose con la cancha libre, se fue a Cusco y a Puno, donde han estallado los mayores actos de violencia, y anunció el Runasur, pero también crear la República Autónoma del Sur, recortando territorio peruano, como también chileno, esto es una barbaridad; entonces, siguió en esa prédica hasta que finalmente fue declarado persona no grata por el congreso y se le inició un proceso judicial”, puntualizó el excanciller.


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