María René Álvarez, legisladora chiquitana por Creemos, expuso los principales problemas de la región en su intervención en los actos por la efeméride cruceña
Durante los actos protocolares de celebración del aniversario de Santa Cruz, organizados por la Brigada Parlamentaria cruceña, la diputada María René Álvarez denunció dos problemáticas que son impulsadas desde el centralismo contra el oriente, Chiquitanía y Amazonía del país: la deforestación y los avasallamientos.
La diputada cruceña participó de los actos conmemorativos por el grito independentistas del 24 de septiembre de 1810, y rescató el valor de la población cruceña que continúa con su desarrollo, pese a las trabas del sistema centralista, pero también lamentó que el verde de la bandera de Santa Cruz, que representa la riqueza natural del departamento, hoy se ve afectada por esos dos males señalados.
Sobre la deforestación, Álvarez citó el reciente informe de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN), que confirmó que entre 2011 y 2022, en Bolivia se alcanzó una pérdida de la cobertura boscosa del 37%, siendo Santa Cruz el departamento más afectado con 20% de deforestación. Y dentro del departamento es el bosque chiquitano el que más pérdidas registra
con 30% de hectáreas en San Ignacio, San Rafael, San José de Chiquitos, Roboré, San Miguel, Carmen Rivero Torrez, Concepción, además de Charagua y Guarayos.
“Todos estos datos objetivos, medibles y comprobables confirman que las políticas de supuesta “defensa de la Madre Tierra” que manejó el MAS desde su llegada al poder, solo fue y es un discurso populista y demagogo, porque en los hechos Bolivia con sus áreas protegidas y sus bosques está peor que nunca, rumbo a un desastre ambiental irreparable”, dijo.
En cuanto a los avasallamientos, la diputada calificó las «acciones coordinadas del régimen del MAS y sus grupos corporativos de los denominados interculturales, como una neo colonización interna para tomar Santa Cruz».
Como ejemplo de este avance violento de los avasalladores sobre territorio cruceño, la diputada ejemplificó los casos sucedidos entre 2021 y 2022 con las tomas en San Ignacio, Bajo Paraguá y Guarayos.
En ese sentido, también alertó que los avasalladores actúan sobre todo contra los pueblos indígenas de tierras bajas, ingresando a los parques nacionales y reservas forestales.
“Nuestra labor de fiscalización y el registro que llevamos de cada caso desde el Comité de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados, servirá en un futuro para llevar la voz de los pueblos y comunidades avasalladas a estrados internacionales, donde se desnudará el falso discurso del MAS que se convirtió en el principal enemigo de los pueblos indígenas de tierras bajas”.