En Grecia, las llamas arrasan desde hace poco más de dos semanas el norte del país, cerca de la frontera terrestre con Turquía. En esta zona boscosa, unas 90.000 hectáreas de vegetación ya se han esfumado en lo que ahora es «el mayor incendio jamás registrado» en Europa. El tamaño del incendio se ha reducido considerablemente en comparación con días anteriores, pero aún no se ha extinguido.
Por el enviado especial de RFI a Alejandrópolis
Fuente: rfi.fr
En la región de Evros, aunque el tamaño del fuego se ha reducido significativamente, las consecuencias de este extraordinario incendio son considerables. En un mapa de Copernicus [el sistema europeo de vigilancia de incendios forestales, nota del editor] en el norte de Grecia, desde la gran ciudad de Alejandrópolis hasta el bosque vecino de Dadia, hay una zona quemada que se extiende por casi todo el territorio de esta región fronteriza, como una enorme cicatriz.
Sobre el terreno, conduciendo por esta misma zona quemada, la naturaleza ofrece kilómetros de paisajes desolados, arrasados y decolorados por el fuego. En concreto, se ven hileras de árboles desnudos sobre tierra ennegrecida, a veces grisácea. Un espectáculo que contrasta con el intenso color verde que aún cubre los árboles que se salvaron de las llamas. Y en el lugar, incluso a cierta distancia de los incendios, y aunque uno acabe por acostumbrarse, también hay un persistente olor a quemado en el aire en casi todas partes.
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A la espera de que la lluvia ponga fin al incendio
Sin embargo, las últimas declaraciones de los bomberos griegos parecen ir ahora en la dirección de un retroceso de las llamas. La presencia en la pista del aeropuerto de Alejandrópolis- la gran ciudad más cercana a la catástrofe-, de un gran número de aviones para apagar incendios es la prueba de que la lucha contra el fuego continúa en la región. Pero el tamaño del frente principal ha disminuido y las llamas se concentran ahora en el bosque de Dadia, no lejos del pueblo fronterizo de Souflí.
La esperanza en el lugar ahora es que la lluvia acelere el final de este extraordinario incendio. Eso es precisamente lo que indican las previsiones meteorológicas: podría llover este lunes o martes, lo que probablemente pondría fin al que se está calificando como el mayor incendio «registrado» en la Unión Europea, es decir, el mayor desde hace más de veinte años.
Un verano de evacuaciones
Los incendios son un fenómeno estacional en Grecia, pero el país los ha sufrido especialmente este verano, con 26 muertos -entre ellos un grupo de inmigrantes atrapados por las llamas y dos pilotos de aviones para apagar fuegos implicados en un accidente- y con al menos 150.000 hectáreas quemadas en todo el país.
El verano aquí también estuvo marcado por el aumento de las órdenes de evacuación, como en Rodas en julio, donde más de 20.000 personas -entre ellas muchos turistas- tuvieron que huir de emergencia ante los incendios. Esta política de evacuaciones preventivas es el resultado de otro incendio, en 2018, en la localidad de Mati. En aquel momento, el fuego mató a un centenar de personas en apenas unas horas, y es un trauma nacional en Grecia.