Un estudio muestra que las vacunas de Pfizer tenían muchas más probabilidades de producir proteinas aberrantes que, según algunos expertos, pueden aumentar el riesgo de desencadenar enfermedades autoinmunes.
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Puede haber alrededor de una probabilidad de 1 entre 10 de que las vacunas de ModRNA de Pfizer contra la COVID-19 no generen proteínas de espiga (la proteína objetivo de estas vacunas), sino una serie de proteinas aberrantes ajenas al organismo humano y al sistema inmunológico, según un nuevo estudio de Cambridge(Mulroney y colegas (Nature (2023). https://doi.org/10.1038/s41586-023-06800-3.), lo que genera preocupación sobre la respuesta autoinmune entre los expertos
Los autores del estudio encontraron que el 8 por ciento de las veces, las vacunas de ModRNA de Pfizer contra la COVID-19 están mal traducidas en los ribosomas, lo que lleva a la formación de proteínas no deseadas. Por el contrario, la vacuna de AstraZeneca que no contiene plataforma de ModRNA, no tiene ese problema.
Esta mala traducción se debe principalmente a la modificación de Pfizer en sus bases de mRNA usadas en su vacuna.
Se puede pensar en las vacunas de ModRNA como un conjunto de instrucciones que se utilizan para producir proteínas de espiga. Una vez que la vacuna ingresa a la célula, los ribosomas interpretan las instrucciones del ModRNA para producir proteínas, como proteínas de espiga.
Si se malinterpretan las instrucciones se pueden producir errores en la proteína final. Algunos errores son menores, como escribir mal una palabra en un texto, mientras que otros son más perjudiciales.
Esta interpretación errónea se denomina cambio de marco de lectura y ocurre cuando se omiten una o dos bases de mRNA. Dado que las bases del mRNA se traducen en conjuntos de tres, omitir una base afectaría todas las secuencias posteriores, lo que llevaría a la formación de otras proteínas aberrantes diferentes de la proteína objetivo, en este caso la espiga del virus.
Si bien la mayoría de los mRNA naturales contienen uridina, las vacunas de ModRNA de Pfizer utilizan N1-metilpseudouridina. Esto hace que la secuencia de mRNA sea más resistente y menos propensa a ser degradada en las células. La opción de Pfizer por bases de mRNA que aparecen con menor frecuencia es también la razón por la que algunos científicos llaman a las vacunas de mRNA, RNA modificado o ModRNA.
Al implementar ediciones adicionales en las secuencias de mRNA, Mulroney y colaboradores lograron reducir más proteínas con desplazamiento del marco de lectura, algo importante para corregir el diseño defectuoso del ModRNA utilizado por Pfizer.
El cambio del marco de lectura da como resultado la producción de proteínas múltiples, únicas y potencialmente aberrantes.
Esto explicaría el aumento significativo en las enfermedades autoinmunes subsecuentes a la administración de vacunas ModRNA en comparación con vacunas para Influenza durante el periodo 2020 a 2023 ( favor ver artículo adyacente en EJUTv titulado “ Todos los daños causados por los productos Covid-1ModRNA injectables eran predecibles y prevenibles “ ). Estos resultados son muy importantes para el uso futuro de la tecnología de mRNA, y es importante que» se modifique el diseño de la secuencia de mRNA para reducir estos defectos, concluyeron los investigadores Mulroney y colaboradores en su brillante trabajo (Nature (2023). https://doi.org/10.1038/s41586-023-06800-3.).
Además de los errores de cambio del marco de lectura, la modificación de N1-metilpseudouridina también puede ralentizar e interrumpir la traducción del mRNA a proteína, lo que puede dar lugar a secuencias de proteínas más cortas de lo esperado.
«En circunstancias ideales, los ribosomas traducen el mRNA de la vacuna en la proteína S [espiga]… Si la máquina celular (ribosomas) ‘detecta’ la diferencia [entre la uridina normal y la N1-metilpseudouridina], puede provocar un estancamiento o una traducción errónea(ver figura)
En el estudio, los investigadores primero inocularon ratones con las vacunas Pfizer y AstraZeneca. Descubrieron que las vacunas de Pfizer tenían significativamente más probabilidades de producir proteínas con alteración o desplazamiento del marco de lectura. Luego, los investigadores compararon las inoculaciones de vacunas en humanos, comparando 21
Figura. Cuando los ribosomas cometen errores en la traducción del mRNA, se forman proteínas aberrantesaberrantes).
Participantes que recibieron la vacuna Pfizer con 20 que recibieron la vacuna AstraZeneca.
Ninguno de los vacunados con AstraZeneca tuvo una reacción inmune a las proteínas producidas por errores de traducción pero alrededor de un tercio de los vacunados de Pfizer, sí la tuvieron.
Inmunidad y autoinmunidad mal dirigidas
La autoinmunidad ocurre cuando el sistema inmunológico ataca los propios tejidos. Puede ocurrir durante muchos años antes de que se manifiesten los síntomas.
La inmunidad dirigida a proteínas aberrantes extrañas al organismo humano tiene un enorme potencial de ser dañina. Siempre se deben evitar las respuestas inmunitarias no deseadas.
Mulroney y colegas no definieron con más detalle la inmunidad mal dirigida, aunque generalmente describe una reacción en la que el sistema inmunológico del cuerpo ataca tejidos y órganos.
Dado que las vacunas ModRNA de Pfizer NO pueden ser dirigidas selectivamente a ciertas células o tejidos únicamente; más, por el contrario, se expresan esencialmente en todos los tejidos del organismo humano y por tiempos muy prolongados(años). Por lo tanto, la expresión de proteínas aberrantes producidas por el marco de lectura alterado y translación defectuosa de las ModRNAs de Pfizer, pueden activar y desencadenar respuestas inmunológicas repetitivas y crónicas mientras la expresión de esas proteinas extrañas persistan en el órgano o tejido en cuestión. Esto causará disfunción y daño de los órganos a lo largo del tiempo.
En este caso, puede significar que en lugar de entrenar al cuerpo para combatir las proteínas de espiga del virus SARSCov-2, está estimulando al sistema inmunológico para combatir las proteínas que se producen de forma no natural y aberrantes .
Por otro lado, los hallazgos del estudio realizado por el inmunólogo Aristo Vojdani sugieren que las proteínas de espiga tienen el potencial de causar reacciones cruzadas (lo que significa que el cuerpo ataca accidentalmente el propio tejido en una lucha contra otros patógenos o proteinas extrañas) con más de 20 tejidos humanos diferentes, ya que comparten similitudes estructurales con las proteínas humanas
De hecho, hay evidencia de que las vacunas ModRNA contra Covid-19 han aumentado la frecuencia de enfermedades autoinmunes comparado con las personas vacunadas contra la influenza durante el periodo de 2020 a 2023( por favor, leer artículo acompañante en eju.tv titulado “Todos los daños causados por los productos Covid-19 ModRNA injectables eran predecibles y prevenibles”).
Proteínas Desconocidas en el Cuerpo Humano
Actualmente, se desconocen la estructura o secuencia de las nuevas proteínas formadas por ModRNA de Pfizer y descritas por Mulroney y colegas.
Los autores identificaron en el estudio que una de las proteínas detectadas era una proteína quimérica, una formada al unir dos o más genes que originalmente codificaban proteínas separadas. La proteína quimérica era estructuralmente similar a las proteínas humanas, lo que podría inducir respuestas autoinmunes.
Diseño defectuoso
Engler dijo que el hecho de que las inyecciones de ModRNA puedan tener defectos en el marco de lectura del RNA en los ribosomas y traducirse mal, es un error de diseño. Otros no están completamente de acuerdo y arguyen que los cambios del marco de la lectura son eventos poco comunes, pero que ocurren, por ejemplo, en infecciones virales… Estos dan lugar a productos proteicos que también pueden ser atacados por el sistema inmunológico. Es importante recordar, sin embargo, que algunas infecciones virales desencadenan enfermedades autoinmunes. Así pues, el virus de Epstein-Barr desencadena la Esclerosis Múltiple, una clara enfermedad autoinmune (.https://eju.tv/2022/02/el-virus-epstein-barr-desencadena-la-esclerosis-multiple/).
Sin embargo, Mulroney y colegas, autores del estudio, destacaron claramente que la secuencia de ModRNA sintético utilizada en la vacuna Pfizer era propensa a errores del marco de lectura del RNA de transferencia en los ribosomas y que esto debe corregirse lo antes posible, para evitar problemas serios de salud.
Cuando los ribosomas cometen errores en la traducción del mRNA, se forman proteínas aberrantes
Ronald Palacios Castrillo, M.D.,PhD.