Tras la imposibilidad de realizar su congreso para elegir una nueva directiva nacional, el Movimiento Al Socialismo (MAS) que respalda al expresidente Evo Morales se declaró en estado de “indefensión” por las decisiones del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y advirtió que su “proscripción está en curso”.

Al final, la convocatoria del lunes 10 en Villa Tunari, en el Chapare de Cochabamba, se convirtió en un “gran encuentro nacional”. Esto ante la negativa del TSE para supervisar el cónclave por no cumplirse una serie de requisitos dispuestos en el propio estatuto del partido oficialista.

“Lo que están haciendo es restringir los derechos de una organización política, estamos en una situación de total indefensión; ellos deciden cumplir las acciones constitucionales de ciertos jueces jurisdiccionales, pero siguen con desconocer las de otros”; remarcó Diego Jiménez, parte del equipo jurídico del MAS evista.

MAS evista

Ni los recursos judiciales de este bloque oficialista llegaron a buen puerto para “obligar” al TSE para un acompañamiento del planificado congreso; tal como sucedió con el cónclave del MAS que apoya al presidente Luis Arce (arcistas) en mayo; el cual contó con la supervisión, empero, las decisiones no fueron reconocidas tras una decisión del tribunal por no cumplir requisitos.

“Señores feudales”, “tribunal celestial”, fueron adjetivos usados contra los vocales del máximo ente electoral, que el año pasado también rechazó el congreso del MAS evista en Lauca Ñ. No tener una nueva directiva reconocida por el Órgano Electoral derivó en una primera amonestación para la tienda oficialista.

El equipo jurídico del evismo rechazó esto. El exprocurador Wilfredo Chávez, miembro de este grupo, advirtió que “la proscripción está en curso”. El encuentro del lunes ratificó a Morales como el único candidato para las presidenciales de 2025 y conminó al presidente Arce a promulgar las leyes aprobadas en una polémica sesión de la Asamblea.