¿Qué es un “golpe blando”, término utilizado por el gobierno de Luis Arce?

El presidente Luis Arce alertó el 27 de mayo, por primera vez, sobre los intentos de un “golpe blando”, durante la conmemoración del 215 aniversario de la creación del Regimiento Primero de Infantería Colorados de Bolivia.

Por Paulo Alejandro Lizárraga Alvarado
El presidente Luis Arce, en un anterior contacto con la prensa. Foto: Lucho Arce (Facebook)
El presidente Luis Arce, en un anterior contacto con la prensa. Foto: Lucho Arce (Facebook)

 

Fuente: Visión 360



Desde el presidente Luis Arce hasta sus ministros utilizaron en alguna ocasión el término “golpe blando”, para referirse a los “ataques” provenientes de sus detractores, sean estos sectores sociales, opositores o el ala «evista» del Movimiento Al Socialismo (MAS). Sin embargo, nunca aclaran lo que significa.

El término “golpe blando” hace referencia a un ataque no directo y, por lo general, no violento, ejercido por sectores políticos, ejecutivos o judiciales, de carácter conspirativo con el fin de desestabilizar a un gobierno y causar su caída, sin que parezca que ha sido consecuencia de la acción de su poder.

De acuerdo con el politólogo estadounidense, Gene Sharp, dicha estrategia puede ejecutarse a través de cinco etapas jerarquizadas y ejecutadas de manera simultánea.

Entre ellas se encuentra la conducción de conflictos y promoción del descontento, la promoción de factores de malestar: desabastecimiento, criminalidad, manipulación del dólar, lockout patronal (cierre de empresas), denuncias de corrupción a través de medios y promoción de las mismas sin sustento real.

“Su principal característica radica en la apariencia de legalidad que, a partir del apoyo de sectores judiciales, mediáticos y de los servicios de inteligencia, busca convencer a una porción de la sociedad civil y la sociedad internacional de que el gobierno surgido de dicho golpe es legítimo”.

Su uso por parte de políticos

El presidente Arce alertó el 27 de mayo, por primera vez, sobre los intentos de un “golpe blando”, durante la conmemoración del 215 aniversario de la creación del Regimiento Primero de Infantería Colorados de Bolivia.

“La antipatria se muestra con careta democrática, escondiendo sus fines abiertos de atentar contra el orden constitucional mediante planes siniestros que procuran a un golpe blando o un acortamiento de mandato”, afirmó.

Un día después, el 28 de mayo, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, ratificó, durante un breve contacto con la prensa, la postura del mandatario afirmando además que existe “desinformación y politización” en contra de la gestión gubernamental.

“Hay un tema de desinformación, evidentemente, hay una situación de politización y buscar, como el presidente del Estado (Luis Arce), lo decía la pasada jornada, esos ‘golpes blandos’, esa desestabilización existe”, denunció Alcón,

Más recientemente, quien utilizó el término fue el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, quien acusó ayer a la Embajada de Estados Unidos de estar involucrada en la desestabilización del gobierno.

“Con toda claridad, todo esto es un plan que viene desde la Embajada de Estados Unidos, hay que señalarlo con toda claridad, y hay otras embajadas que están de alguna manera involucradas en un plan de golpe blando a la economía”, dijo Montenegro.

En síntesis, se puede concluir que se trata de una estrategia “encaminada a la desestabilización de un gobierno” de forma sutil y con acciones no directas, sino camufladas, de acuerdo con el portal de noticias digital www.kienyke.com.

Dicho término fue también utilizado por el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en el contexto de una serie de acciones que sus opositores habrían realizado con el fin de perjudicar a su gobierno.

“Desgaste” y “contradicciones internas”

Ximena Costa, analista política y exparlamentaria de Unidad Demócrata, consideró que Arce y el Gobierno recurren a este término, debido al “desgaste” de la imagen del primer mandatario.

En entrevista con Visión 360, Costa sostuvo que se trata de una estrategia de Cuba, para que durante un momento de “desgaste de la autoridad”, se genere un hecho que conmocione a la población y le devuelva “algo de apoyo a la autoridad».

“Es producto del desgaste. Es parte de una estrategia, la estrategia cubana en un momento de desgaste de la autoridad, lo que se hace es tratar de generar un hecho mediático que conmueva a la población y le devuelva algo de apoyo a la autoridad desgastada (…). Lo que nos está probando esta denuncia es que es tan severo el desgaste de la imagen del presidente Arce”, sostuvo Costa.

El investigador Róger Cortez dijo a Visión 360 lo siguiente: “Yo creo que tenemos que reconocerle el término al presidente Luis Arce, porque acaba de crear una nueva acepción distinta. Golpe blando significa: ‘reconozco que he hecho las cosas mal, pero no me atrevo a confesarlas’. Es una nueva acepción, hay que saber entender a un hombre angustiado, atribulado, que no ve salidas, que se sienta pesimista e invente palabras. En este caso es una nueva acepción al término”.

El analista Pedro Portugal manifestó que antes los “golpes blandos o duros” provenían de sectores opositores al Gobierno. Y que ahora estos provienen de “contradicciones internas” de los partidos que postularon a Luis Arce en Bolivia; y al propio Gustavo Petro, en Colombia.

“Es curioso que ambos acudan a esta versión de ‘intento de golpe blando’. Antes los golpes blandos o duros los daba la oposición; esta es una gran diferencia. Ahora son contradicciones internas de los grupos políticos de los cuales han surgido estos presidentes”, dijo en entrevista con Visión 360.

Fuente: Visión 360