El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, informó este domingo que las acciones asumidas por el Gobierno con el desplazamiento de militares en apoyo a la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), para el control de venta de combustible en las estaciones de servicio de diferentes ciudades y municipios del país durante estos días, hizo posible la normalización en la distribución principalmente de gasolina y diésel.

La autoridad indicó que la venta de combustible está plenamente garantizada para la ciudadanía, por lo que reiteró el pedido a la población de no preocuparse ni generar filas innecesarias en las estaciones de servicio.

“Lo que queremos es que se normalice la venta de combustible y una vez normalizado y pase la especulación, se retirarán estás acciones de apoyar en el control y habremos cumplido el objetivo”, enfatizó.

En conferencia de prensa, Novillo lamentó que ante la acción de control que se llevó adelante, surgieron rumores malintencionados de que se estaba militarizando para amedrentar a la ciudadanía, tergiversando de ese modo el rol de las Fuerzas Armadas que es de apoyar y ponerse al servicio de los intereses del pueblo boliviano.

“No queremos que haya malos ciudadanos que desvíen el combustible con otros fines ilícitos y el contrabando”, dijo la autoridad.

Por ello, se reforzaron con más efectivos militares los puestos de control en las fronteras y es el viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Daniel Vargas, quien está comandando las tareas principalmente en la frontera con Argentina, complementó Novillo.

Control

El martes, el presidente Luis Arce anunció la militarización de las estaciones de servicio con el objetivo de que los carburantes sean desviados a actividades ilícitas.

Desde el miércoles se observaron efectivos de las Fuerzas Armadas en las estaciones de servicio en todo el país, con el objetivo de garantizar la distribución de combustible y evitar actividades ilícitas e irregulares.

Sin embargo, el expresidente Evo Morales afirmó este domingo, en su programa dominical, que la decisión del Gobierno de poner a militares a controlar la venta de combustible en los surtidores es el “inicio de la militarización” del país. “Lo que dijo Lucho (Arce) que vamos a controlar las estaciones de servicio con militares es el inicio de la militarización de Bolivia, que sepa el pueblo boliviano”, manifestó Morales.