A once días del fallido golpe de Estado que protagonizó el excomandante del Ejército de Bolivia Juan José Zúñiga se develan más detalles de la asonada militar del 26 de junio, así como las críticas, las contradicciones, los apoyos, las duda y los detenidos.
Fuente: lostiempos.com
Mientras prosiguen las investigaciones y procesos en la justicia ordinaria, aún se desconoce si los militares implicados serán suspendidos o dados de baja en forma definitiva.
El jefe del Estado Mayor del Ejército, Marco Antonio Peñaloza, dijo que, tras el procedimiento administrativo sumarial, será un tribunal militar el que determine si se da de baja o no a los militares implicados en el intento de golpe de estado del 26 de junio.
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El 26 de junio, Zúñiga lideró un movimiento militar irregular en la plaza Murillo de la ciudad de La Paz que fue catalogado como un intento de golpe de Estado por parte del Gobierno.
Ese día, el militar habló de que el Ejército buscaba “recuperar la patria” y hasta afirmó que habría un nuevo gabinete ministerial. También ingresó a Palacio Quemado por la fuerza y tuvo un careo con el Jefe de Estado.
La “intentona golpista” fracasó después de que el Presidente posesionara un nuevo Alto Militar y el nuevo comandante de las Fuerzas Armadas, Wilson Sánchez, ordenara el repliegue del Ejército, según el Gobierno.
Ratificación de golpe
Los últimos días, el presidente Luis Arce y varios de sus ministros dieron más información para sustentar la versión de que el 26 de junio hubo un golpe de Estado fallido.
En un acto público en Potosí, Arce dijo que “ese golpe de Estado está evidenciado, el que no ve eso, está alineándose con la derecha, se está alineando con los intereses antinacionales”.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, contó qué tan real fue el golpe que el 26 de junio militares y policías estuvieron a punto de enfrentarse a tiros en el Palacio Quemado cuando el presidente Luis Arce encaró y pidió que se retire a Zúñiga.
Dudas
Desde la oposición, el evismo, expresidentes y analistas persisten las dudas de si realmente fue un intento de golpe de Estado. Los más escépticos hablan incluso de “autogolpe”.
“Habiendo tenido mi propia breve experiencia como jefe de Estado, puedo decirles que no se puede tomar un ascensor para bajar 16 pisos y charlar con el tipo que ha movido tanques hasta las puertas de entrada”, dijo Eduardo Rodríguez Veltzé, exmagistrado y expresidente.
“Si fuera un golpe la presidencia purgaría las Fuerzas Armadas”, dijo el exmilitar y analista Jorge Santiesteban. “Por el contrario, el Presidente premió al comandante en jefe que no hizo nada ante una gran insurrección cometida por su subordinado” al mantenerlo en el cargo.
Las contradicciones entre ministros y entre militares detenidos también afloraron
No sólo es la asonada golpista, sino que hay intereses que quieren arrebatarnos la democracia y el poder, quieren manejar nuestros recursos”
Luis Arce
Presidente del Estado
Es nuestra misión comenzar un proceso de transformación del Estado que al final se entregará al siguiente Gobierno electo”
Juan José Zúñiga
(Manifiesto “golpista”).
Fuente: lostiempos.com