Persecución y detenidos políticos. Agresiones de entidades estatales contra los ciudadanos. Restricciones a las libertades. La democracia y los derechos humanos en Bolivia están en retroceso y configuran un escenario que acerca al país a una dictadura.
Fuente: https://asuntoscentrales.com
Ese es el balance que hizo en Asuntos Centrales la activista Jhanisse Vaca Daza quien acaba de llegar al país para impulsar la unidad de los esfuerzos contra los abusos que, según ella, comete el Gobierno de Luis Arce Catacora y el MAS.
Vaca Daza calcula que hay más de 300 detenidos y perseguidos políticos en Bolivia, una cifra alarmante que muestra el grado de autoritarismo que crece en el país bajo el régimen el MAS, según Vaca Daza, fundadora del movimiento por los derechos humanos Ríos de Pie.
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“Bolivia se acerca cada vez más hacia una dictadura y la mejor prueba es que hoy tenemos una democracia cada vez más débil”, manifestó.
De hecho, “no somos una democracia plena” por el deterioro de las principales instituciones de la democracia: la Justicia y el Legislativo, principalmente.
“La capacidad real de los partidos es muy pobre”, remarcó.
Vaca Daza se animó a clasificar diferentes regímenes políticos que son, de hecho, dictaduras o están en camino a serlo.
“El presidente Nayib Bukele en El Salvador es un autócrata con graves violaciones a los derechos humanos”, indicó.
“Arabia Saudí es la dictadura de derecha más grande del mundo por los ataques y las persecuciones contra activistas de los derechos de las mujeres y de los derechos humanos”, señaló.
“Rusia, Irán, China y Cuba son las dictaduras más duras e influyentes”, alertó.
“Vladimir Putin encabeza una de las dictaduras más duras del mundo”, denunció.
“Hay alianzas entre dictaduras que son de ideologías diferentes, ya sean de izquierda o de derecha”, precisó.
EL CASO BOLIVIANO
Según la activista de los derechos humanos, “en Bolivia estamos bajo un autoritarismo muy grave y antidemocrático”
“Con Luis Arce Catacora el autoritarismo ha empeorado”, dijo Vaca Daza.
“En Bolivia hay más de 300 presos y perseguidos políticos”, aseguró.
“Creo que están en aumento los presos políticos en Bolivia. Probablemente van a seguir aumentando los presos políticos en el país”, anticipó.
Es que “el régimen irá entorpeciendo su ejercicio del poder autoritario con más detenidos sin procesos justos”.