En el mercado, las ofertas de alimentos de toda clase y sobre todo lácteos para niños abundan. Sin embargo, muchos de ellos no reflejan los valores que muestran en sus etiquetas o no tienen el correcto control sanitario durante su transporte.
Fuente: El Mundo
Por ello, Mary Nela Saucedo, médico pediatra especialista en nutrición infantil y materna, brinda algunos consejos a los padres de familia para identificar si un alimento lácteo o cualquier otro producto es de calidad y no una falsificación. Primero deben verificar que los materiales utilizados sean seguros como por ejemplo plásticos libres de BPA, libres de productos tóxicos, que tengan certificaciones de seguridad, que tenga las instrucciones claras para el consumo seguro, incluya la tabla nutricional completa y, sobre todo, que provenga de una marca reconocida que opera bajo altos estándares de calidad.
“Consumir productos infantiles sin garantía representan múltiples riesgos para los niños desde tener materiales tóxicos, no tener componentes nutritivos, provocar lesiones o enfermedades en menores, dolencias crónicas o problemas en el desarrollo de cada infante. Lo que al inicio parece más barato para el bolsillo puede derivar en costos muchos más elevados”, comentó Saucedo.
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La especialista también aconseja priorizar una alimentación equilibrada y nutritiva desde una edad temprana, que son las bases para un crecimiento y desarrollo saludable a lo largo de la infancia y la vida adulta.