Desde Aprisa señalan que la falta de liquidez en el sector agrícola también afecta a las casas comerciales que proveen insumos, semillas y otros elementos para la actividad del campo.
Fuente: Unitel
El presidente de la Asociación de Proveedores de Insumos, Bienes y Servicios Agrícolas y Pecuarios (Aprisa), Jorge Araníbar, se sumó al pedido de un fondo de reactivación para el sector productivo, el cual viene siendo demandado con miras a encarar la siembra de verano que está en puerta.
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Desde instituciones como la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y de la Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) consideran que la falta de liquidez comprometen a la labor del agro y, sobre todo, la economía de los pequeños productores, por lo que piden al Gobierno un fondo de reactivación y financiamiento de $us 500 millones para encarar la actividad agrícola.
“Tenemos que entrar al crédito agrícola, hay un crédito productivo que el Gobierno ha estado fomentando, que de alguna manera debería entrar todos los productores, donde la banca juega un rol importante”, sostuvo el ejecutivo de Aprisa.
En esta línea, el dirigente señaló que, al acceder a ese crédito, el agricultor va a poder pagar al contado por los insumos agrícolas y así va a poder tener estos productos a un menor precio, según expuso en entrevista con Canal Rural.
Y como consecuencia de este estímulo, las casas comerciales van a tener flujo para poder pagar a sus proveedores externos y comprar en mejores condiciones. “Entonces, con el crédito yo creo que se transparentaría y se mejoraría toda la situación del mercado”, remarcó.
Desde Aprisa confirmaron en días pasados que dejaron de vender insumos a crédito y ahora los pagos que deben realizar los agricultores son al contado, esto debido a que las casas comerciales deben hacer pagos a los proveedores, en un contexto en el que se dificultan las importaciones por la coyuntura del dólar.
Ante la caída de la producción de granos y las dificultades económicas de los agricultores, estos no pueden pagar los insumos al contado y es por ello que las casas comerciales aún cuentan con stock en sus inventarios.
“Es difícil financiar en bolivianos. Las deudas son en bolivianos, con un dólar tan fluctuante. Entonces, si hoy día yo financio a Bs 10 un producto y lo cobro en 5 meses, que es más o menos lo que dura la campaña hasta que el agricultor pague, en 5 meses el dólar, si se va como la anterior vez a Bs 14, es una pérdida muy grande para la casa comercial”, sostuvo Araníbar.