Investigación: En 10 años el MAS administró Bs 626 mil millones en proyectos de «bajo impacto»

El libro ¿Cómo la plata del gas se hizo gas? señala que los recursos de la época de bonanza en Bolivia se fueron en gasto corriente, sedes sindicales, Fondo Indígena y proyectos de bajo impacto sin retorno.
El gobierno del MAS "nacionalizó" los hidrocarburos. Foto: Ministerio de Hidrocarburos
El gobierno del MAS «nacionalizó» los hidrocarburos. Foto: Ministerio de Hidrocarburos

 

Por Marco Antonio Belmonte

El estudio “Cómo la plata del gas se hizo gas” realizado por Julio H. Linares establece que entre los años 2006 y 2015, el Estado boliviano, gobernado por el Movimiento al Socialismo (MAS), percibió los ingresos más altos de su historia: 626 mil millones de bolivianos, más de cuatro veces que en los diez años anteriores, pero ingresos que se diluyeron a la mínima expresión en proyectos inviables y sin impacto.

El texto publicado por la Fundación Pazos Kanki realiza un análisis del comportamiento de la renta hidrocarburífera en la época de la bonanza (2006-2015), el cual será presentado este 6 de agosto a las 20 horas en la Feria Internacional del Libro, sala Julio de la Vega, bloque rojo.



Linares explicó que entre 1996 y 2005, los diferentes gobiernos “neoliberales” administraron alrededor de 161 mil millones de bolivianos por concepto de recaudación tributaria, regalías, y otros, menos el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).

Estos recursos, dijo, subieron a más de 626 mil millones de bolivianos en los siguientes diez años (2006 – 2015) e incluyen regalías, IDH, créditos externos, donaciones y otros ingresos. El mayor pico se dio entre 2013 y 2014, cuando se lograron las mayores tasas de crecimiento del PIB y se alcanzaron las mayores Reservas Internacionales Netas (RIN).

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Infografía: Diego Gonzales

Renta hidrocarburos

El estudio determina que la “Renta hidrocarburífera”, en los años de bonanza, fue de más de 21 mil millones de dólares entre 2006 y 2015, y representaron casi un tercio de los ingresos estatales.

Estos recursos provienen de las regalías y del IDH, patentes, y del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), que fueron implementados en base a la promulgación de la Ley 3058 de Hidrocarburos, en 2005, antes de la época de bonanza. El pico se da en 2014 cuando se alcanza un ingreso de 98 mil millones de bolivianos, agregó Linares.

Además, explicó que estos ingresos son los que ayudaron a que las Reservas Internacionales Netas (RIN) alcancen los registros más altos en 2014 con 14.430 millones de dólares y en 2015 con 15.123 millones de dólares y que en años posteriores descienden de manera dramática.

¿En qué se gastaron esos recursos?

Según Linares, en el estudio se pudo encontrar que un 20% de la renta de los hidrocarburos se fue a financiar la Renta Dignidad, que si bien tiene una loable intención, aseguró que es insostenible por la caída de ingresos del IDH.

Añadió que otro 18%, aproximadamente, se fue a Tarija y lo que hizo la Gobernación fue transferir una buena parte de los recursos a municipios y que se diluyeron en proyectos pequeños sin impacto.

Otro porcentaje 3% se fue al Fondo Indígena, entidad que, de todo lo percibido, un 94% lo transfirió a proyectos con municipios, organizaciones indígenas de todo tipo, asociaciones, como las Bartolina Sisa, ponchos rojos y donde el IDH terminó diluyéndose.

Agregó que otro 18%, en promedio, se dirigió al TGN que gastó el dinero en transferencias a municipios, organizaciones, alianzas políticas para la construcción de sedes sindicales y compra de camionetas. El restante 30% de los recursos se destinó a los gobiernos municipales donde la plata también «se diluyó» en proyectos de poca envergadura; y el resto, en gasto corriente como sueldos de profesores, médicos, compra de medicamentos, desayuno escolar, entre otros.

Lineras señaló que las regalías por hidrocarburos beneficiaron sobre todo a Tarija y departamentos como Beni y Pando que de pronto comenzaron a percibir 10 veces más ingresos que en años anteriores y que no tenían la capacidad administrativa o técnica para invertir mejor.

¿Qué se debió hacer?

Linares señala que en el gobierno de Evo Morales no hubo ningún milagro económico, ya que recibió un 25% más de ingresos, en general, y un 80% más de ingresos, por hidrocarburos.

Aseguró que en 2006 ya estaba vigente el IDH, al igual que los contratos de venta de gas con Brasil y los gasoductos, y ese país como Argentina tenían déficit y necesitaban importar el recurso boliviano. Además, los precios comenzaron a subir de manera exponencial y todo el trabajo que se hizo en la época neoliberal estaba hecho para que se aproveche la bonanza.

De acuerdo con Linares debió existir una mejor planificación para invertir los recursos, realizar proyectos mancomunados de alto impacto y retorno, y ponerse límites estrictos al gasto corriente.

La palabra del Gobierno

El Gobierno, al defender el proceso de “nacionalización”, en 2022 informó que el Estado Plurinacional de Bolivia recibió alrededor de 50.000 millones de dólares por concepto de renta petrolera en 16 años, gracias a que estatizó los hidrocarburos y sentó soberanía sobre sus recursos naturales.

“Después de 16 años, los resultados de la nacionalización son visibles. El país ha percibido por concepto de renta petrolera alrededor de 50.000 millones de dólares. Estos ingresos permitieron ejecutar proyectos de salud, educación y de otros sectores, además, posibilitaron financiar programas y bonos sociales como la Renta Dignidad, el Bono Juancito Pinto, el Bono Juana Azurduy y otros, que se enmarcan en la política social de distribución de la riqueza”, expresó el ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina Ortiz.

Las universidades y los gobiernos departamentales y municipales también se fortalecieron con la redistribución del ingreso proveniente de la renta, ya que, además de regalías, la Ley de Hidrocarburos Nº 3058 y el decreto viabilizaron la creación del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) que beneficia a las regiones productoras.