Tras la represión policial contra los campesinos que buscan recuperar su sede de la Federación Tupac Katari en La Paz, el expresidente y jefe del Movimiento Al Socialismo (MAS), Evo Morales, mencionó este lunes al presidente Luis Arce y al vicepresidente David Choquehuanca y les dijo que “la sede sindical no es puesto policial”.

“Ustedes han demostrado hoy una vez más su actitud dictatorial al no respetar al movimiento indígena, a los movimientos sociales y las sedes sindicales y reprimir violentamente a las hermanas y hermanos Ponchos Rojos, causando varios heridos de gravedad”, escribió Morales desde sus redes sociales.

Añadió que no se entiende como “el vicepresidente puede permitir que se reprima a los hermanos de su comunidad, de su municipio y provincia. Esta es una prueba más de que vivimos peor que en una dictadura. La lucha del pueblo boliviano seguirá hasta recuperar la democracia y salvar Bolivia”.

En sesión del Legislativo, la diputada por el MAS de la facción evista, María Alanoca, pidió al presidente nato de la Asamblea, vicepresidente David Choquehuanca, que pare el accionar de la policía, además que los diputados y senadores no se callen por las agresiones contra los campesinos.

“Vicepresidente escúchanos. Te estoy clamando en este momento, pará a los policías, somos del pueblo. Esos hermanos son bolivianos, porque nos vamos a callar. Senadores y diputados porque estamos callados. Yo estoy molesta de mis hermanos”, dijo la legisladora a Choquehuanca.

Quien también se pronunció por la represión contra los campesinos fue el presidente de la Comisión de Justicia Plural de la Cámara de Diputados, Froilán Mamani. Pidió también al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, que “repliegue a la Policía”.

“No es posible que nos estemos enfrentando entre campesinos, siendo de la misma organización”, dijo el diputado.

Tras una marcha por las calles de la urbe paceña, los campesinos de la Federación Departamental de Trabajadores Campesinos de La Paz ‘Túpac Katari’ intentaron recuperar su sede sindical, pero fueron gasificados por la policía.

En un cabildo, los ponchos rojos determinaron bajar a sus bases para sumar a las organizaciones sociales y paralizar desde el sábado el departamento de La Paz.

“Ahora más que nunca tienen que irse. Nosotros como autoridades del comité ejecutivo departamental vamos a convocar a un ampliado departamental y nacional para determinar medidas y acciones drásticas como el bloqueo de caminos. Ahora los gobernantes que están en los 17 ministerios van a morir de hambre desde el sábado. Vamos a ir a un bloqueo nacional”, amenazó el dirigente de los Túpac Katari, David Mamani.