Un disparo en la cabeza acabó con la vida de la joven profesora de Guarayos que ayudaba a quienes combaten incendios

Marisabel Moirenda Urape, de 28 años, tenía dos heridas, una en el cuello y otra en la cabeza, por lo que la Policía lo cataloga como una muerte violenta.

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Protesta en Guarayos por la muerte de Marisabel Moirenda (derecha)

Fuente: Unitel

Marisabel Moirenda Urape, de 28 años, es la maestra que fue encontrada sin vida la noche del miércoles cuando salía de ayudar a realizar alimentos para los bomberos forestales que trabajan en la sofocación de incendios en Ascensión de Guarayos en el departamento de Santa Cruz. Tras la autopsia se confirma que su muerte fue violenta, ya que recibió un disparo de arma de fuego en la cabeza.



Según el comandante de la Policía, Erick Holguín, el informe de la autopsia revela que la maestra tenía dos heridas, una en la cabeza y otra en el cuello.

“Se establece que es una persona que tenía dos heridas, en el cuello y en el cráneo, en primera instancia se presume que la herida de la cabeza era por un golpe, pero en la autopsia se establece a una lesión provocada por un proyectil de arma de fuego”, expresó Holguín.

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Marisabel fue hallada tirada a un lado de su motocicleta, a una cuadra de la unidad educativa donde se encontraba realizando labores de ayuda para los bomberos que trabajan contra los incendios forestales en su municipio.

“Se confirma que es una muerte violenta. Lo manejamos como homicidio hasta tener los móviles y circunstancias del hecho para ver si no cambia de tipificación, pero que lo determinará el Ministerio Público”, agregó Holguín.

Personal de la Policía Boliviana se desplazó hasta Ascensión de Guarayos para realizar operativos y las investigaciones de este caso para dar con el o los autores que le provocaron la muerte a Marisabel Moirenda Urape.