La principal diferencia radica en la altitud: La Paz se encuentra a 3,640 metros, mientras que El Alto está a 4,150 metros sobre el nivel del mar. Este jueves, Bolivia recibe a Colombia desde las 16:00
Fuente: eldeber.com.bo
La selección boliviana de fútbol se prepara para jugar en el Estadio Municipal de Villa Ingenio, ubicado en El Alto, a 4,150 metros sobre el nivel del mar, lo que representa un cambio significativo respecto a su habitual sede en el Estadio Hernando Siles de La Paz, que está a 3,650 metros.
Este cambio plantea un desafío considerable para las selecciones visitantes, como Colombia, que se enfrentará a la Verde este jueves por la fecha 9 de las Eliminatorias Sudamericanas.
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El Estadio Municipal de Villa Ingenio ha sido sede de un partido reciente, donde Bolivia logró una contundente victoria por 4-0 contra Venezuela. Este triunfo refuerza la estrategia de la selección nacional para aprovechar su ventaja geográfica.
La altitud puede ser un factor determinante en el rendimiento físico y mental de los jugadores rivales, quienes experimentan dificultades como la falta de oxígeno y la fatiga más rápida debido a la menor presión atmosférica. Esto se traduce en un juego más lento y menos efectivo para aquellos que no están aclimatados.
Las selecciones visitantes suelen reportar una serie de efectos negativos al jugar a gran altitud. Los jugadores pueden experimentar mareos, dolores de cabeza y una disminución en su capacidad aeróbica.
Además, la adaptación a la altura requiere tiempo y entrenamiento específico; sin embargo, muchos equipos llegan con poco tiempo para aclimatarse adecuadamente.
Por ejemplo, el director técnico de Colombia, Néstor Lorenzo, ha incluido en su plantilla a futbolistas que militan en ciudades de altura y ordenó realizar toda su preparación en Cochabamba (2,558 m.s.n.m), a manera de que sus jugadores se vayan aclimatando gradualmente a a altura.
La diferencia entre jugar en La Paz y El Alto es notable por los metros de diferencia que existen entre ambos y, también radica en el ambiente del estadio.
Aunque ambos son altos, el Municipal de Villa Ingenio es más pequeño y tiene una atmósfera más intensa debido a su capacidad para 22,500 espectadores, lo que crea un ambiente más intimidante para los visitantes.
Esto puede influir psicológicamente en los jugadores rivales, quienes enfrentan no solo la presión física de la altitud sino también el fervor del público local.
La elección del Estadio Municipal de Villa Ingenio como sede refleja una estrategia más amplia por parte de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) para maximizar las ventajas que ofrece la altitud.
Este cambio ha sido bien recibido no solo por los aficionados locales, sino también por los jugadores bolivianos que se sienten más cómodos jugando en su propio entorno.
La FBF espera que esta estrategia continúe rindiendo frutos en sus esfuerzos por clasificar al Mundial 2026.
Este jueves, Bolivia buscará repetir su éxito anterior contra Colombia y aprovechar al máximo las condiciones del nuevo estadio.
Con el apoyo del público y la familiaridad con la altitud, la selección nacional tiene la oportunidad de sumar puntos cruciales en su camino hacia el Mundial.
La combinación de factores físicos y psicológicos jugará un papel vital en el desenlace del encuentro y podría marcar una diferencia significativa en las eliminatorias.