Fuente: https://www.marca.com
Varios medios británicos, sobre todo tabloides, y la revista Bunte se apresuraron a asegurar hace unos días que Michael Schumacher había asistido a la boda de su hija, Gina María, celebrada en Mallorca la semana pasada. En concreto, la publicación alemana, ya fue condenada en 2017 al pago de 50.000 euros en concepto de daños y perjuicios, por publicar la información de que Schumi había vuelto a caminar de nuevo y que hablaba. La familia los denunció de inmediato.
Una semana después de las informaciones de las que no hay prueba gráfica y que se celebró en la más estricta intimidad de la familia, un neurocirujano pone en jaque dichas informaciones, sobre que Michael, de 55 años hubiera podido presenciar la boda.
El doctor Jussi Posti, a cargo del departamento de neurocirugía y lesiones cerebrales traumáticas en el Hospital Universitario de Turku (Finlandia), duda que el piloto alemán esté lo suficientemente bien como para haber asistido a la boda.
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«Si se ha construido un hospital en su casa, con todo medicalizado a su alrededor, parece que ha estado la mayor parte del tiempo como si estuviera ingresado», afirma en el periódico ‘Iltalehti’.
«Basándome en la información disponible, no creo que lleve una vida muy activa. Todo apunta a que está mal. Como paciente en cama, la mayoría de las personas se vuelven tan frágiles y rígidas que ya no es posible levantarlas de la cama después de tantos años», argumenta Posti, dando un argumento médico sobre su posible estado.
El especialista admite que no tiene información privilegiada sobre la condición de Schumacher, pero el hecho de que casi nadie más sepa nada, excepto un círculo muy cercano de familiares y amigos, es revelador. «Sugiere que probablemente ha estado en la misma condición durante la última década. Dudo que algo repentino haya cambiado en esta etapa», sostiene
«Normalmente, los pacientes recuperan lo que pueden recuperar durante hasta dos años, y luego el nivel de recuperación generalmente queda esteblecido. Esencialmente, este tipo de pacientes son modelos muy experimentales en el mejor de los casos», dice sobre la recuperación en traumas como el que sufrió Schumacher..
Posti dice que ha leído que el siete veces campeón del mundo se comunica con sus ojos. «Hay varias secuelas del daño cerebral. Por ejemplo, la lesión puede hacer que el paciente no esté dispuesto a comunicarse con nadie que no sea su familia inmediata», explica.
«También puede suceder que nadie más que su familia inmediata pueda estimular al paciente lo suficiente para que pueda comunicarse de manera significativa», añade sobre su posible estado actual.