Desde Unicef señalaron que la severa afectación en el medio ambiente debido a los incendios forestales en Bolivia, está causando daños en la salud y acceso a la educación de los niños.
Fuente: Unitel
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef por sus siglas en inglés) alertó que de la degradación ambiental a causa de los incendios, que se registran en la zona de la Chiquitania, en el departamento de Santa Cruz, tiene mayor impacto en los niños de las comunidades chiquitanas.
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Unicef indicó que realizó un recorrido por las zonas afectadas por los incendios en varios municipios de la zona del oriente del país, llegando a las comunidades de Las Petas, Tornitos, Pozones, Candelaria y San Fernando del municipio de San Matías. Afirman que constataron que la situación de la niñez y adolescencia es “particularmente grave”.
El representante a cargo de Unicef, Gregor von Medeazza, alertó que “la degradación ambiental causada por los incendios forestales representa una de las amenazas más urgentes y graves para la capacidad de las generaciones actuales y futuras de disfrutar del derecho a la vida”.
Agregó que “las niñas y niños más vulnerables son los que están recibiendo el mayor impacto. Hoy se hace evidente que se está afectando su derecho a la educación y salud”.
El reporte de la institución, del 19 de septiembre, señala que desde julio, los niños chiquitanos de la comunidad de Las Petas, en el municipio de San Matías, dejaron de asistir a las clases regulares debido a los incendios.
“La mayor parte de los días hemos pasado clases solo durante unas tres horas. Es difícil mantener la concentración con este medio ambiente tan intoxicado por el humo”, indicó una estudiante citada en informe de Unicef.
En tanto, en su recorrido por San Matías encontraron que los incendios “están provocando deshidratación, conjuntivitis, diarreas y salmonelosis entre la población”.
En tanto, el oficial de Emergencias de Unicef, Alejandro Lujan, señaló que además de las enfermedades respiratorias, “las cenizas también contaminan las fuentes de agua, afectando especialmente a los menores de 5 años”.
Agregó que “las clases en las unidades educativas no son regulares, ya que los estudiantes tienen dificultades para concentrarse debido a la humareda” y señaló que los incendios también pueden generar miedo y ansiedad, en especial si los niños se ven obligados a dejar su hogar o separarse de sus seres queridos.
Por su parte Unicef anunció la entrega de insumos de higiene, filtros de agua y material escolar.