Hadi al Bahra, presidente del máximo órgano político de la oposición siria en el exilio, afirmó que la vertiginosa ofensiva “era lo esperado” dado que el dictador asumió que sus soldados eran “los mismos que en 2011″, cuando empezó la guerra civil.
Entrenamiento durante más de una década, turnos constantes, una operación planeada y coordinada entre diferentes grupos armados y la baja moral de las tropas del derrocado dictador sirio, Bashar Al Assad, fueron los principales factores de éxito de la ofensiva rebelde en Siria, según un líder opositor.
Hadi al Bahra, presidente del máximo órgano político de la oposición siria en el exilio, la Coalición Nacional Siria (CNFROS), afirmó a EFE este domingo desde el Foro de Doha que la vertiginosa ofensiva que logró llegar a Damasco en tan solo 12 días “era lo esperado” dado que Al Assad asumió que sus soldados eran “los mismos que en 2011″, cuando empezó la guerra civil.
“Los soldados de la oposición han estado entrenándose y se les ha dado sangre nueva. Se les ha enseñado a utilizar drones, a utilizar armas avanzadas y también a planificar y elaborar estrategias”, afirmó el político, que indicó que las tropas de Al Assad “no lo hicieron”.
Un rebelde sirio sobre un busto de fallecido presidente sirio Hafez Assad en Damasco el 8 de diciembre del 2024 (AP foto/Hussein Malla)
Además, la operación iniciada el 27 de noviembre “fue una sorpresa para el régimen” ya que los insurgentes emplearon un sistema de tres turnos cada ocho horas para poder combatir sin descanso día y noche.
A esto se añadió la baja moral del Ejército sirio tras el debilitamiento del grupo chií libanés Hizbulá, que sufrió cuantiosas pérdidas durante más de un año de hostilidades con Israel, mientras que Irán y Rusia tampoco hicieron un gran aporte para repeler la ofensiva de los rebeldes y defender a su aliado, Al Assad.
El líder del grupo rebelde Al Jolani llegó a Damasco tras el derrocamiento de Bashar Al Assad
“Esta vez no vieron muchos aviones (de combate) rusos y sabían que Hezbollah no vendría y que Irán no vendría. Además, el apoyo logístico del régimen es muy pobre. Pusieron soldados en primera línea y si comían una patata y un huevo, eso ya era perfecto”, indicó Al Bahra.
“No tienen ropa adecuada para el invierno para mantenerse calientes. No tienen camas. No tienen baños. Entonces, ¿por qué deberían luchar? ¿Para quién? Mientras, nuestros combatientes son los desplazados internos que quieren volver a sus hogares, así que están luchando para volver a sus casas”, indicó.
El presidente de la Coalición Nacional para la Revolución Siria, Hadi Al-Bahra, en conferencia de prensa en Estambul el 2 de diciembre del 2024 (AP foto/Khalil Hamra)
Desde el estallido de la guerra en Siria en 2011, más de 14 millones de sirios se han visto obligados a huir de sus hogares, según datos de la ONU, que indican que más de 7,2 millones “siguen desplazados internamente en su propio país”, donde el 70 % de la población necesita asistencia humanitaria y el 90 % vive debajo del umbral de la pobreza.
El régimen del dictador sirio Bashar Al Assad, aferrado al poder durante 24 años, colapsó este domingo a manos de los insurgentes liderados por HTS que tomaron Damasco sin apenas resistencia tras 12 días de ofensiva.
Los órganos políticos de la oposición siria han comenzado este domingo a trazar las líneas maestras de un futuro políticopara el país tras la caída de la dinastía Al Assad tras medio siglo de mandato con puño de hierro con intenciones más o menos coincidentes a pesar de la rivalidad que les separa.
Los sirios saquearon el palacio presidencial en Damasco (AP foto/Hussein Malla)
Las dos entidades más destacadas son la CNS, una alianza de grupos de oposición formada en el exilio tras el levantamiento de 2011 contra Al Assad, y el Gobierno de Salvación Nacional, considerado a todos los efectos el brazo político del grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham, rival de la CNS.
Este domingo, el presidente de la CNS, Hadi al Bahra, ha propuesto un período de transición de 18 meses en el país, incluidos seis meses para redactar una nueva Constitución. Al Bahra también ha recomendado la “ampliación de la coalición que dirige” para recabar apoyos dentro de Siria, teniendo en cuenta que la CNS está reconocida por EEUU y sus aliados pero su respaldo dentro del país es muy limitado (sobre todo en la comunidad kurda, que considera a la coalición un instrumento de Turquía, su enemigo declarado).