Abriendo su modelo de IA, la empresa lanza un desafío a líderes del sector. Según Fortune, la apuesta también trae consigo controversias, críticas y posibilidades ilimitadas para desarrolladores y negocios
Meta se enfrentó a una decisión crucial sobre el modelo de inteligencia artificial Llama 2 en el verano de 2023 (REUTERS)
Fuente: infobae.com
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En el verano de 2023, Meta enfrentaba una decisión clave: liberar su modelo de inteligencia artificial Llama 2 como un proyecto de código abierto. Este paso podría reposicionar a la compañía en la carrera de la IA generativa, dominada por empresas como OpenAI y Google.
El modelo anterior de Llama, diseñado solo para investigadores, se había filtrado en internet, despertando gran interés por ser gratuito y de calidad comparable a sus competidores cerrados, explica un artículo de Fortune.
Yann LeCun, director científico de IA de Meta, y Joelle Pineau, vicepresidenta de investigación, defendían liberar el modelo para acelerar su desarrollo y reducir costos. Sin embargo, otros ejecutivos advertían sobre posibles riesgos legales y el mal uso del modelo, recordando anteriores fracasos de la empresa con lanzamientos de IA que atrajeron fuertes críticas públicas y políticas.
Mark Zuckerberg, fundador y accionista principal de la compañía, resolvió el dilema. Después de consultar a diversas partes, decidió lanzar Llama 2 como un modelo abierto para investigación y uso comercial. Justificó su decisión afirmando que el código abierto impulsaría la innovación, permitiendo a más desarrolladores mejorar la tecnología. “Creo que desbloquearía más progreso si el ecosistema fuera más abierto”, escribió en su cuenta de Facebook, marcando un punto de inflexión en la estrategia de la compañía.
La Filosofía del código abierto en Meta
El lanzamiento de Llama 2 fue una apuesta estratégica que redefinió la posición de Meta en la industria tecnológica. La empresa eligió un camino distinto, buscando generar un ecosistema más participativo. Su objetivo fue posicionarse como un estándar industrial, similar a lo que sucedió con Linux en el sector de sistemas operativos.
Sin embargo, esta estrategia no estuvo exenta de controversia. Algunos críticos argumentaron que el uso del término “código abierto” era inexacto, ya que Meta restringió ciertas aplicaciones comerciales y no reveló sus conjuntos de datos de entrenamiento. Pese a estas críticas, el impacto de Llama en la comunidad tecnológica fue notable, consolidando a Meta como uno de los actores clave en el desarrollo de la inteligencia artificial generativa.
Llama 3
Meta avanza con Llama 3, compitiendo con OpenAI y Anthropic en velocidad y precisión (REUTERS)
Desde el lanzamiento de Llama 2, la corporación de Mark logró avances significativos en el desarrollo de sus modelos de inteligencia artificial, llevando a Llama 3 a competir directamente con modelos cerrados de OpenAI y Anthropic en términos de velocidad y precisión.
Para 2024, el modelo más grande de Llama 3 igualaba o incluso superaba a los modelos más potentes de sus competidores en varios benchmarks. Esta evolución se vio facilitada por el uso de datos públicos de Facebook e Instagram, que Meta utilizó para entrenar sus IA, lo que les dio una ventaja significativa en términos de accesibilidad a grandes volúmenes de información.
Llama, además de su uso en investigaciones, se integró en productos clave de la corporación fundada por Mark, alcanzando una audiencia global de usuarios. Meta incorporó el modelo en su asistente de IA, que ahora funciona a través de Facebook, Instagram, WhatsApp y Messenger.
También se implementaron herramientas de generación de texto para anunciantes, así como aplicaciones innovadoras en dispositivos como las gafas Ray-Ban y los cascos Quest. Este enfoque demostró que la inteligencia generativa estaba al servicio de la investigación, comenzando a tener aplicaciones comerciales tangibles y masivas.
A través de estas aplicaciones, la empresa logró demostrar la versatilidad de Llama en distintos campos, desde la generación de contenido hasta la creación de chatbots personalizados por parte de los usuarios.
Además, la compañía sigue explorando la integración de Llama en futuros proyectos, como el desarrollo de su propio motor de búsqueda impulsado por IA, lo que marcaría otro paso en su intento por crear un ecosistema de inteligencia artificial integrado en todos sus productos.
Desafíos financieros y estrategia comercial
A pesar de los avances técnicos y estratégicos logrados con Llama, la empresa se enfrenta a un gran desafío financiero. En 2023, la compañía anunció que sus gastos de capital proyectados para 2024 podrían alcanzar hasta 40 mil millones de dólares, lo que representa una inversión significativa en la infraestructura de la IA.
Aunque esta cifra refleja el enorme compromisos con la IA generativa, también generó dudas entre los inversores sobre la rentabilidad a corto y mediano plazo de estos gastos, especialmente considerando que muchos de los productos basados en Llama se ofrecen de manera gratuita a miles de empresas. Empresas gigantes como Goldman Sachs, AT&T y Accenture ya utilizan Llama sin costo, lo que plantea interrogantes sobre cómo se logró monetizar estas tecnologías.
Los críticos señalan que open-source como modelo de negocio podría complicar el camino hacia la rentabilidad, ya que Llama se ofrece sin tarifas directas para el acceso a su código, lo que podría hacer difícil justificar la gigantesca inversión. Sin embargo, algunos analistas, como Shweta Khajuria de Wolfe Research, consideran que la estrategia tiene potencial a largo plazo. Según Khajuria, al hacer Llama de acceso libre, la empresa logró ponerse al nivel de OpenAI, Google y Anthropic más rápidamente de lo que habría sido posible mediante enfoques cerrados, lo que podría traducirse en nuevas fuentes de ingresos en el futuro.
El camino hacia la monetización no está claro, pero se especula que Meta podría generar ingresos a través de suscripciones y publicidad en aplicaciones basadas en Llama. Además, se prevé que las herramientas impulsadas por IA en plataformas como Facebook, Instagram y WhatsApp puedan facilitar nuevas formas de interacción con los usuarios y negocios.
Mientras tanto, Zuckerberg defendió que su enfoque de código abierto no comprometería la sostenibilidad de la empresa, argumentando que Llama no disminuye la capacidad para invertir en investigación o generar ingresos a través de sus servicios, aunque los inversionistas siguen observando de cerca la rentabilidad de la apuesta.
Críticas y controversias
Meta enfrenta críticas por la liberación del modelo Llama como código abierto debido a restricciones en su uso (REUTERS)
A pesar del éxito técnico de Llama y la estrategia abierta de la empresa, la decisión de liberar el modelo como código abierto no estuvo exenta de críticas y controversias. Uno de los principales puntos de debate fue el uso del término “código abierto” para describir a Llama, ya que Meta impuso ciertas restricciones en su uso.
Aunque el código y los pesos del modelo son accesibles, la compañía no reveló los conjuntos de datos utilizados para entrenarlo, lo que algunos expertos consideran una limitación en su apertura.
Además, se restringió el uso comercial del modelo por parte de empresas con más de 700 millones de usuarios activos, una medida que parece estar dirigida a evitar que sus competidores más cercanos, como Google o Apple, se beneficien de su tecnología.
Otro frente de críticas proviene de aquellos que temen que el uso masivo de Llama en manos de desarrolladores y empresas pueda derivar en abuso de la tecnología. Algunos señalan que, aunque el modelo está diseñado para ser flexible y adaptable, su accesibilidad también podría facilitar la creación de herramientas maliciosas, como phishing o spam personalizado, lo que podría tener repercusiones en la seguridad y privacidad de los usuarios.
Esta preocupación fue tan relevante que, en junio de 2023, dos senadores estadounidenses enviaron una carta a Zuckerberg expresando su preocupación por el uso indebido del modelo y sus posibles implicaciones legales.
A pesar de estas críticas, la empresa no dio marcha atrás en su apuesta por el código abierto. Nick Clegg, presidente de asuntos globales de Meta, defendió la postura de la compañía, comparando el debate con aquellos que se preocupan por los detalles de la música en vinilo, en lugar de centrarse en el valor de la innovación.
La compañía sostiene que, al final, lo más importante es la colaboración global que fomenta el código abierto, y que el uso responsable y ético de Llama dependerá de la comunidad. Sin embargo, la compañía sigue enfrentando la tensión entre la necesidad de proteger su tecnología y la filosofía de apertura que, según sus defensores, podría transformar la industria de la IA.
La estrategia de Meta en la carrera de la IA generativa refleja un cambio tecnológico, y también un renacer personal para Mark Zuckerberg. Después de la recepción negativa de su inversión en el metaverso, que no logró cautivar a los consumidores ni a los inversores, Zuckerberg encontró una nueva dirección con la IA.
Con tan solo 40 años, el CEO de Meta está disfrutando de lo que algunos llaman su Zuckaissance, un periodo de renovación tanto en su imagen personal como en la visión empresarial de la compañía. Este resurgir se ve reflejado en su decisión de apostar todo a la IA generativa, alejándose del proyecto del metaverso que, en 2022, llevó a la empresa a sufrir importantes pérdidas y a enfrentar críticas públicas.
A medida que la empesa se prepara para lanzar Llama 4 y avanzar en la creación de inteligencia general avanzada (AMI), la compañía encara un futuro lleno de desafíos regulatorios y una competencia feroz.