Debido a los altos costos de ingreso al país y la falta de políticas efectivas para fomentar el turismo, los operadores del sector proponen implementar un sistema de “cielos abiertos” que facilite la entrada de aerolíneas internacionales al país. En caso de no poder avanzar hacia este modelo, sugieren un esquema de “cielos flexibles”.

En entrevista con La Razón Radio, la presidenta de la Cámara Nacional de Operadores de Turismo, María Lourdes Benavides, informó que según un estudio realizado por el Centro de Investigaciones del Turismo (Cistur), más de 85 mil turistas desistieron de visitar Bolivia este año.

“Si uno toma un vuelo para poder llegar directamente a Bolivia es carísimo, es por eso que el turista prefiere llegar a Lima, prefiere llegar a Sao Paulo, y de ahí recién hacer una conexión para Bolivia”, afirmó.

La propuesta: cielos abiertos o flexibles

Para revertir esta situación, Benavides aseguró que los operadores de turismo propusieron implementar un sistema de “cielos abiertos” que facilite la entrada de aerolíneas internacionales al país.

En caso de no poder avanzar hacia este modelo, sugieren un esquema de “cielos flexibles”, que incluiría la eliminación de trabas burocráticas e impositivas para atraer inversores y fomentar el turismo.

“En vez de abrirnos a los cielos, en vez de dar facilidades a líneas aéreas que puedan invertir y venir a Bolivia para conectarnos, estamos haciendo todo lo contrario”, añadió.

“Nos hemos reunido en múltiples ocasiones con la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos (NAABOL) y Obras Públicas, pero seguimos sin avances concretos. El sector está desgastado por la falta de respuestas”, lamentó Benavides.

El sector proyecta un incremento de 500 mil turistas para el próximo año gracias a las iniciativas de promoción realizadas en colaboración con entidades como Sudamérica Conecta y la Federación Sudamericana de Turismo (FEDESUD).

Sin embargo, Benavides advirtió que estos esfuerzos se verán truncados si persisten problemas estructurales como los bloqueos, quemas y la falta de combustible.