El riesgo de propagación de la tosferina en el país es bastante alto. Pues, uno de cada dos niños no tiene la vacuna que protege contra la enfermedad. El Ministerio de Salud advirtió de que esta situación puede provocar “un brote grande“.

“De dos niños uno no está vacunado, por lo que hay alta probabilidad que la enfermedad pueda provocar un brote bastante grande”, advirtió el viceministro de Promoción y Vigilancia Epidemiológica, Max Enríquez, en conferencia de prensa.

La autoridad señaló que en 2022 se registraron 235 casos, la mayoría en Santa Cruz; en 2023, 827; y en 2024, 26, hasta la semana epidemiológica 49.

La tosferina, también conocida como coqueluche, es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa causada por la bacteria Bordetella pertussis. Afecta las vías respiratorias y se caracteriza por ataques de tos severa que dificultan la respiración.

En casos graves, de forma especial en lactantes, puede provocar complicaciones como neumonía, convulsiones o incluso la muerte.

Según los datos oficiales del Ministerio de Salud, la cobertura de vacuna pentavalente que protege a los menores de edad contra la tosferina, entre otras enfermedades, en su primera dosis alcanzó al 60,9% a noviembre de este año; en tanto, la segunda dosis llegó al 57,8% y la tercera dosis, al 54,5%.

La cobertura de vacunación contra la tosferina en Santa Cruz, en particular, es de 46%, considerada como muy baja. Y tiene una mejor cobertura en el área rural respecto del área urbana.

Enríquez recordó que la vacuna pentavalente protege a los niños contra la tosferina, la difteria, tétanos, hepatitis B, neumonías y meningitis. Son cinco dosis que deben recibir los menores de edad.

El jueves, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) Santa Cruz reportó cuatro casos de tosferina.

El viceministro instó a los padres de familia a no descuidarse y llevar a sus hijos para que reciban los inmunizantes.

La tosferina se caracteriza por una tos seca intensa. Se transmite mediante gotículas salivales. Ante síntomas de la enfermedad, se debe llevar al menor a un centro de salud para que reciba el tratamiento más adecuado.