Estuvo cuatro días preso y era inocente. Juan L. estuvo privado de su libertad tras ser acusado de un delito que no cometió. Luego de conocer este caso, el viceministro de Seguridad Ciudadana, Roberto Ríos, abrió la posibilidad de actualizar la Ley 348 Para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia.

“Es importante trabajar en una actualización y revisión de la normativa que nos permita evitar estos (casos), pero, siempre velando también por los derechos de los sectores más vulnerables de nuestra población”, dijo Ríos, según ABI.

A Juan lo acusaron por la desaparición de su novia, Reyna Huallpa, y de sus dos hijos. Las autoridades tenían la hipótesis de un posible feminicidio e infanticidio. A plan de tortura, como relata el joven, la Policía quiso que Juan revele el paradero de la mujer, cuando no lo conocía.

“(Los policías) me golpearon, me colocaron con una bolsa de plástico en la cara. Me he desmayado dos veces y me han reanimado echándome agua fría. Yo les he dicho que no sé nada, no me creyeron”, relató Juan entre lágrimas.

Así, un juez determinó enviarlo a prisión. Sin embargo, horas más tarde, la mujer a la que buscaban desde el 30 de diciembre de 2024 apareció. Estaba en un alojamiento junto a sus dos hijos.

Ahora Reyna enfrenta un proceso penal por simulación de delito, violencia familiar y abandono de menor.

A pesar de que Juan logró su libertad, acción que no fue inmediata, refleja en su rostro la tristeza y el dolor al recordar el viacrucis que vivió en dos días, los que lo marcaron de por vida.

“Me juzgaron sin conocer (la verdad), me dijeron que yo era el asesino, me torturaron de diferentes maneras y directamente me dijeron: ¡donde la maté! ‘queremos saber dónde está el cuerpo’. Es muy malo el trato que han hecho”, dijo.

Ante esta situación, Ríos remarcó que la Ley 348 significó un avance “muy importante” en la protección de derechos y lucha contra la violencia a la mujer y niños; empero, reconoció que debe “hacerse un análisis y modificar” algunos aspectos.