Las nueve filiales departamentales de la Asociación Boliviana de Árbitros de Fútbol emitieron resoluciones expresando su desacuerdo con el ranking de la Dirección de Desarrollo Arbitral de la federación. Lo consideran “atentatorio” a sus intereses y también “discriminatorio”, entre otras cosas.
Los documentos de ocho afiliadas a ABAF, rechazando la categorización.
Fuente: Brújula Digital
Las nueve filiales departamentales de la Asociación Boliviana de Árbitros de Fútbol (ABAF) rechazan la nueva categorización realizada por la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) para la temporada 2025 y se han declarado en emergencia exigiendo la anulación de esa disposición.
Las organizaciones de árbitros de La Paz, Oruro, Cochabamba, Santa Cruz, Beni, Chuquisaca, Tarija, Potosí y Pando realizaron asambleas departamentales y expresaron su desacuerdo con la nueva disposición anunciada por la Dirección de Desarrollo Arbitral de la FBF, presidida por el exárbitro Víctor Hugo Chambi.
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La categorización fue realizada de manera “unilateral”, sin coordinación con los Comités Departamentales y sus términos son “atentatorios contra los intereses arbitrales”, coinciden los documentos que por separado fueron enviados a la ABAF.
La Paz le atribuye la autoría del ranking a Chambi y asegura que “no tiene fundamento y respaldo objetivo transparente valedero”, además es “discriminatorio por diferentes aspectos (…) causando un malestar general a nivel Bolivia” porque, además, vulnera estatutos y reglamentos.
Santa Cruz rechaza “de manera rotunda la selección/ranking de árbitros” por “el tipo de evaluación que se hizo para llevar a cabo la elección de cada uno” y por “no ser ecuánime”.
“El ranking lo hizo una sola persona basándose en datos no contundentes y con bastantes irregularidades”, agrega.
Cochabamba considera que la nueva categorización ocasionará “el alejamiento de muchos árbitros” y su renuncia “después de muchos años de servicio”.
“Seguramente nuestras asociaciones se quedarán sin árbitros”, añade y declara “persona no grata” a Chambi “por su accionar en este tema y, además, por conductas soberbias y discriminatorias”.
Chuquisaca, al rechazar la categorización, hace notar que “se excluyó a una gran mayoría de árbitros con bastante experiencia y años de servicio en la División Profesional” y que para ello “no hubo coordinación”.
Los árbitros de Tarija hacen notar que “solo los colegiados de categoría Primera Pro podrán dirigir partidos de la División Profesional, los colegiados de categoría Primera Nacional solo podrán dirigir en la Simón Bolívar” y los colegiados de Primera Departamental únicamente a nivel de asociaciones.
Se declaran “en total desacuerdo” con esa categorización porque “desmerece la trayectoria” de muchos árbitros, quienes “quedarán desafectados” del ámbito arbitral.
Potosí hace saber que la nota de la FBF “especifica cuatro (4) colegiados con categoría Primera Pro (un central, tres asistentes); siete (7) colegiados de Primera Nacional (tres centrales, dos asistentes, un central femenino, un asistente femenino); ocho (8) colegiados de Primera Departamental (un central, siete asistentes)”; por tanto, rechaza esos términos y solicita más cupos.
Oruro no está de acuerdo “con los parámetros de evaluación establecidos” y exige “lineamientos y parámetros de calificación y categorización equitativos” para todas las categorías.
Pando considera que debe haber “igualdad de condiciones” y que se califique “sobre los mismos criterios a todos los árbitros”.
Finalmente, para Beni “dicha categorización viene en perjuicio del gremio arbitral a nivel nacional, en muchos casos cortándonos las posibilidades de crecer y superarnos”.
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