El madrileño cree que ya no le quedan posibildiades tras ceder una hora y media.
La etapa de 48 horas ha podido con Carlos Sainz y Lucas Cruz. Aunque la pareja española ha conseguido completar la segunda etapa del Dakar 2025, lo ha hecho a más de una hora y media de la cabeza… y esa es la desventaja que tiene en la general, con 10 días aún por delante.
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Es una diferencia amplia, sin duda. Y para Carlos Sainz, definitiva. Así lo reconocía a su llegada al campamento de Bisha después de conseguir terminar los casi 1.000 kilómetros de especial, 600 de los cuales los hizo al volante de un Ford Raptor destrozado.
Rendido a la evidencia
«Queda todavía muchísima carrera. Evidentemente, mis opciones de ganar han desaparecido. Pero como digo, si puedo ayudar al equipo, puedo aprender y puedo probar alguna cosa, pues mejor», comentaba visiblemente contrariado.
«»El resumen es que todo ha salido mal. Ayer tuvimos el accidente y perdimos bastante tiempo y después nos perdimos. Y esta mañana hemos tenido otro pinchazo [sólo tenían una rueda de repuesto] y luego nos hemos perdido mucho tiempo en un sitio en el que no éramos capaces de encontrar el camino. Dos días para olvidar, muy difíciles de aceptar nada más empezar la carrera», añadía.
Labor de equipo
Otro objetivo puede ser ganar etapas, aunque el madrileño espera primero recuperarse del golpe recibido, tanto físico como moral: «»Quiero recuperarme, tanto anímicamente como físicamente. Me duele un poco la espalda, la tengo un poco tocada, pero no creo que tenga nada fuera de lo normal, solo el golpe».