La fiscal Martha Mejía señalo que existe los indicios de que estos militares fueron partícipes en la «ejecución del golpe fallido».
La Fiscalía General del Estado presentó la ampliación de la imputación contra 23 militares procesados por resoluciones contrarias a la Constitución y las leyes, esto en relación a los hechos registrados el 26 de junio cuando tomaron la plaza Murillo con tanquetas y armas de grueso calibre.
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Mirtha Mejía, directora de la Fiscalía Especializada en delitos de Corrupción, Tributarios, Aduaneros y Legitimación de Ganancias Ilícitas, informó que existe los indicios correspondientes de todas estas personas que fueron participes “en la ejecución del golpe fallido”.
“Son 23 personas, todas militares de rango superior, entre los cuales están el comandante general del Ejército (Juan José Zúñiga), comandante general de la Armada Boliviana (Juan Arnez), entre otros. Se está desarrollando las investigaciones correspondientes bajo la dirección funcional de una comisión de fiscales”, señaló.
En diciembre del año pasado, el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó que esa cartera de Estado solicitó investigar a los militares detenidos por la asonada militar por otros tipos penales que cometieron en la toma de la plaza Murillo.
Dijo que la ampliación de la investigación es para que “el día de mañana algunas personas no puedan alegar que estaban cumpliendo alguna instrucción”.
Mencionó entonces que los militares investigados “sabían” que estaban generando un “golpe de Estado” dentro el país, por lo que se espera que máximo hasta febrero se esté presentando o tramitando la acusación formal y posterior a ello el juicio oral.
El 26 de junio, un grupo de militares, encabezado por entonces comandante del Ejército; general José Zúñiga, tomaron la plaza Murillo con tanquetas y armas de grueso calibre.
Entonces, los militares intentaron ingresar a la fuerza al Palacio Quemado, golpeando la puerta con una tanqueta. Zúñiga anunció a los medios que su intención era la “toma” de la Casa Grande del Pueblo.
El jefe militar se insubordinó ante el presidente Luis Arce en el ingreso al Palacio Quemado, pero la situación no pasó a mayores. Al final, Zúñiga huyó de la plaza y fue aprehendido, no sin antes implicar al mandatario. Hoy está detenido en la cárcel de El Abra en Cochabamba.
Por este hecho, al menos 35 personas entre civiles y militares son investigados y 27 ya cuentan con una imputación formal por la Fiscalía.