La negligencia de Branko Marinkovic: un favor directo a Evo Morales y a su impunidad


 

La decisión de la justicia argentina de declarar infundada la denuncia presentada a instancia de Branko Marinkovic contra Evo Morales por estupro, trata y tráfico de personas pone en evidencia no solo la falta de pruebas, sino la negligencia de los denunciantes, que han terminado favoreciendo al exmandatario. Lejos de buscar justicia, esta acción mal fundamentada fortalece la narrativa de Morales de ser una víctima de persecución política, contribuyendo a su impunidad.



-Los hechos denunciados y su gravedad:

La denuncia apuntaba a que Morales trasladó a territorio argentino a por lo menos dos mujeres con las que habría mantenido relaciones desde que eran menores de edad. Uno de los casos más graves señalaba que Morales no solo habría tenido una relación con una menor de edad, sino que también habría concebido un hijo con ella, a quien llevó junto con la madre al país vecino mientras gozaba de asilo político. Además, la denuncia incluía a otra joven, Noemí, quien habría sido su pareja desde que también era menor de edad.

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Estos actos configurarían no solo abuso de menores, sino también trata y tráfico de personas con el fin de evadir la justicia boliviana. Este hecho hace que las autoridades argentinas sean competentes para investigar, dado que el traslado y la permanencia de estas personas ocurrieron en su territorio. Sin embargo, la ausencia de pruebas concretas impidió que el caso prosperara.

-Una denuncia sin sustento: el papel de Marinkovic

El fiscal argentino Eduardo Taiano rechazó la denuncia debido a su falta de fundamentación. Las únicas pruebas presentadas fueron dos recortes de noticias periodísticas, que, conforme a la legislación argentina, no son judicializables en ausencia de evidencia material o testimonios directos. La jurisprudencia es clara: las investigaciones penales deben basarse en hechos concretos, no en conjeturas vagas o artículos de prensa.

La negligencia de Branko Marinkovic al no aportar elementos probatorios sólidos fue determinante para que la justicia argentina desestime la denuncia. Este fracaso procesal no solo implica una oportunidad perdida para investigar posibles delitos graves, sino que también constituye un favor directo a Evo Morales, quien ahora puede presentarse como víctima de acusaciones infundadas, reforzando su narrativa de persecución política.

-Una cadena de errores que alimenta la impunidad

Otro aspecto relevante del caso es la falta de cooperación internacional para robustecer la denuncia. Marinkovic no solicitó se requiera la colaboración con la fiscalía boliviana, que podría haber proporcionado información crucial para sustentar las acusaciones. Además, el director nacional de normativa y relaciones con los poderes judiciales, quien impulsó la denuncia, tampoco aseguró que el caso cumpliera con los requisitos básicos para abrir una investigación penal seria en Argentina.

Ambos actores, Marinkovic y el funcionario encargado, cometieron errores garrafales que, en lugar de buscar justicia para las víctimas, terminaron debilitando las posibilidades de que Morales enfrente un proceso judicial legítimo.

-La justicia como herramienta de impunidad

Este caso demuestra que una denuncia mal fundamentada no solo es sospechosamente inútil, sino peligrosa, ya que refuerza la percepción de que las acusaciones contra Morales carecen de sustento. Esto permite que el exmandatario continúe presentándose como una víctima de ataques políticos, desviando la atención de las graves acusaciones en su contra.

El papel de Marinkovic en este proceso no puede entenderse de otra forma que como un favor directo a Morales. Su negligencia no solo obstaculizó la búsqueda de justicia, sino que fortaleció la posición de quien pretendía denunciar. En lugar de actuar con la seriedad y el rigor que un caso de esta magnitud requiere, su accionar terminó alimentando la narrativa de impunidad que Morales utiliza tanto dentro como fuera de Bolivia.

La lucha contra la impunidad exige más que declaraciones mediáticas para ganar popularidad: requiere responsabilidad, pruebas sólidas y una estrategia legal bien diseñada. Fracasos como este no solo deslegitiman las acusaciones, sino que también contribuyen a perpetuar la injusticia.

Fuente: Facebook Nadia Beller


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