Se trata del mayor caso de agresiones sexuales a menores en la historia del país.
Fuente: Infobae
Cuando la Policía del oeste de Francia registró la casa del cirujano Joel Le Scouarnec después de que violara a su vecina de 6 años en 2017, encontró un alijo de muñecas sexuales, pelucas y pornografía infantil.
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Dijeron que también descubrieron diarios electrónicos que parecían detallar casi tres décadas de violaciones y agresiones sexuales a cientos de sus jóvenes pacientes en hospitales de toda la región.
En 2020, Le Scouarnec fue condenado a 15 años de prisión por la violación y agresión sexual de su vecina menor de edad, así como de sus dos sobrinas y una paciente de 4 años.
Sin embargo, continuó la investigación sobre las víctimas registradas en sus archivos. Finalmente, los fiscales le acusaron de violación y agresión sexual con agravantes de 299 personas, muchas de las cuales eran niñas, y algunas de las cuales estaban anestesiadas cuando supuestamente se produjeron las agresiones.
El 24 de febrero, Le Scouarnec, de 74 años, será juzgado por esos cargos en la localidad bretona de Vannes, en el mayor caso de agresiones sexuales a menores de la historia de Francia.
Los fiscales afirman que Le Scouarnec ha admitido ante los investigadores muchas de las acusaciones que se le imputan. Sus abogados no quisieron hacer comentarios antes del juicio.
El juicio llega en un momento de ajuste de cuentas en torno a los delitos sexuales en Francia, tras la condena de Dominique Pelicot, declarado culpable en diciembre de drogar a su esposa e invitar a decenas de hombres a su casa para abusar de ella. Otros cincuenta hombres también fueron condenados por violación en un caso que conmocionó al mundo.
El caso de Le Scouarnec planteará duros interrogantes al sistema sanitario público francés, según afirman las víctimas y los grupos de defensa de sus derechos. A pesar de una condena por pornografía infantil en 2005, Le Scouarnec siguió trabajando en hospitales públicos hasta su detención en 2017.
François, un demandante en el caso que tenía 12 años cuando Le Scouarnec supuestamente abusó de él, dijo que esperaba que el caso proporcionara algunas respuestas de un sistema que, según él, le falló.
“Me doy cuenta de que no debería haber sido operado por este cirujano”, dijo François, que pidió ser identificado solo por su nombre. “Me siento traicionado por las autoridades… ¿Por qué nadie prohibió a este cirujano trabajar con niños?”.
Tras descubrir los registros de Le Scouarnec en 2017, los investigadores comenzaron a rastrear posibles víctimas cotejando las descripciones de los diarios con los registros del hospital. Aunque muchos de los pacientes anestesiados no recordaban los supuestos abusos, los psiquiatras han documentado síntomas de estrés postraumático en las víctimas, según los documentos judiciales.
Mathis Vinet tenía 10 años en 2007 cuando su padre y su abuelo lo llevaron al hospital de Quimperle con dolor de estómago.
El abuelo, Roland Vinet, de 78 años, recuerda haber conocido a Le Scouarnec y no haber pensado en la orden del cirujano de que Mathis pasara la noche solo en el hospital, según declaró a la agencia de noticias Reuters.
En su diario, Le Scouarnec recordaba haber agredido sexualmente a un niño ese mismo día y al siguiente, tocándole los genitales de forma inapropiada en cada ocasión, según un documento judicial.
Mathis nunca volvió a ser el mismo después de la visita al hospital, según Vinet, y acabó cayendo en una vida de alcohol y drogas. Murió de una sobredosis a los 24 años en 2021, tres años después de enterarse por la policía de los abusos que supuestamente había sufrido, y de tener recuerdos.
Vinet y su esposa, que son demandantes en el caso, dijeron que creían que Mathis se había quitado la vida. Culpan a Le Scouarnec de la muerte de su nieto.
Condena por pornografía infantil
Le Scouarnec fue condenado en 2005 a cuatro meses de cárcel en suspenso por posesión de pornografía infantil. Al año siguiente consiguió un puesto de cirujano en el hospital público de Quimperle.
Un psiquiatra del hospital alertó a la dirección de su preocupación por el comportamiento de Le Scouarnec en 2006, según un documento judicial, pero el cirujano siguió trabajando con niños.
El fiscal de Lorient, Stephane Kellenberger, cuya oficina dirigió la investigación sobre los presuntos delitos de Le Scouarnec, dijo que ha abierto una investigación preliminar separada para determinar si hubo alguna responsabilidad penal por parte de organismos o personas que podrían haber evitado los abusos.
El Colegio de Médicos de Francia declinó hacer comentarios. La rama local de la asociación en el departamento administrativo de Finistere, que según los documentos judiciales estaba al corriente de la condena de Le Scouarnec en 2005, no respondió a las repetidas peticiones de comentarios.
(Con información de Reuters)