Mario Borda: «BoA es un servicio público que conecta vidas e impulsa el desarrollo de Bolivia»


En un país donde la geografía desafía la conectividad, Boliviana de Aviación (BoA) emerge como un pilar del transporte aéreo, financiando casi la mitad del costo real de los pasajes en rutas nacionales. Esto permite precios accesibles para miles de bolivianos, consolidándola como una empresa de servicio público con impacto social y económico. Los Tiempos entrevistó a Mario Borda, gerente general de BoA, para explorar este rol clave.

Windsor Salas G.

Mario Borda | Hernán Andia

 



Fuente: lostiempos.com

-BoA destaca por mantener tarifas accesibles en rutas nacionales. ¿Cómo logra la aerolínea cubrir la diferencia entre el costo real de un pasaje y el precio que paga el usuario?

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

-Es un esfuerzo significativo que refleja nuestro compromiso como empresa pública. Por ejemplo, un vuelo entre Cochabamba y La Paz tiene un costo operativo superior a los 450 bolivianos, pero lo ofrecemos a 250 bolivianos, conforme a la regulación de la ATT, que no se actualiza hace 20 años. Esto significa que casi el 50% del costo real lo asumimos nosotros, financiándolo con la rentabilidad de nuestras rutas internacionales-.

-¿Qué implica este financiamiento interno para la operación de BoA?

-Significa que priorizamos el acceso al transporte aéreo para la población boliviana sobre una lógica puramente comercial. Generamos 52 millones de dólares mensuales, con gastos operativos de 12 millones y una contribución al Estado de 38 millones. No recibimos fondos públicos; nuestra sostenibilidad depende de una gestión eficiente y de aprovechar mercados internacionales para compensar las tarifas reguladas en el ámbito nacional.

-¿Cómo se refleja esto en la seguridad y calidad del servicio?

-La seguridad es innegociable. Actualmente, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) nos está auditando, y cumplimos con los estándares de los anexos 7 y 17. Además, hemos reducido retrasos, un problema recurrente en el pasado, y los usuarios lo notan. La puntualidad y la confianza son pilares que estamos fortaleciendo.

-Más allá de los números, ¿cómo beneficia este modelo a la sociedad boliviana?  

-La accesibilidad es el corazón de nuestro servicio. Bolivia tiene una geografía compleja, con regiones aisladas que dependen del transporte aéreo para conectarse. Al mantener precios bajos, facilitamos que familias, estudiantes y pequeños comerciantes viajen entre ciudades como La Paz, Cochabamba o Santa Cruz, algo que sería inviable con tarifas de mercado.

-¿Qué impacto tiene esto en la conectividad regional y el desarrollo económico?

-Conectamos 37 aeropuertos en el país, y nuestro plan es operar en al menos 22 de ellos. Esto no solo reduce distancias, sino que impulsa el comercio, el turismo y la integración. Además, trabajamos con gobiernos municipales para desarrollar zonas cercanas a los aeropuertos, promoviendo talleres, escuelas técnicas y logística, lo que genera empleo y dinamiza economías locales.

¿Hay iniciativas específicas para fortalecer este impacto?  

-Sí, estamos impulsando un programa de capacitación en mecánica aeronáutica para ingenieros bolivianos. Esto no solo reduce nuestra dependencia de técnicos extranjeros, sino que crea una industria aeronáutica nacional sólida, con empleos de calidad y proyección a futuro.

-Financiar casi la mitad de los pasajes nacionales suena desafiante. ¿Cómo equilibra BoA este rol social con su viabilidad financiera?  

-La clave está en diversificar ingresos y optimizar costos. Las rutas internacionales, como las que operamos a destinos con alta demanda, nos generan utilidades que reinvertimos en el servicio nacional. Además, hemos modernizado nuestra operación: acabamos de construir un hangar propio, lo que reduce significativamente los costos de mantenimiento que antes pagábamos en el extranjero.

-¿Qué otros factores contribuyen a esta sostenibilidad?

-Bolivia tiene ventajas competitivas. Por ejemplo, el gasto en personal representa menos del 10% de nuestros costos totales, frente al 26% que manejan otras aerolíneas internacionales. También estamos renovando nuestra flota, con tres Boeing 737-700 ya incorporados y más aviones en camino para agosto y septiembre, lo que mejora la eficiencia operativa”.

-¿Y cómo enfrentan el aumento global de costos en la industria aérea?

-“Es cierto que el alquiler de aeronaves, repuestos y combustible ha subido por la escasez global de aviones. Sin embargo, nuestra planificación estratégica y la ausencia de deudas impagables —el crédito Finpro está casi saldado— nos permiten mantenernos rentables y transparentes, sin depender del Tesoro General”.

-¿Qué rol juega la regulación local en este modelo?  

-En Bolivia, los aviones están limitados a 25 años de operación, aunque un Boeing 737 puede volar hasta 100.000 ciclos con buen mantenimiento. Esta restricción nos obliga a renovar la flota antes de lo necesario, aumentando costos. Creemos que esta norma debería revisarse, como ocurre en otros países, para optimizar recursos sin comprometer seguridad.

-Comparado con otras aerolíneas, ¿cómo se posicionan los precios de BoA en rutas nacionales?  

-Nuestras tarifas son significativamente más bajas. Mientras un pasaje Cochabamba-La Paz cuesta 250 bolivianos con nosotros, en una aerolínea privada internacional, sin regulación, podría superar los 500 o 600 bolivianos. En rutas como Santa Cruz-Sucre, el costo real ronda los 400 bolivianos, pero lo ofrecemos a 220 bolivianos, un precio que ninguna empresa privada igualaría.

-¿Qué diferencias ve en las rutas internacionales?

-En el ámbito internacional, competimos con precios ajustados al mercado, pero nuestra ventaja es reinvertir esas ganancias en Bolivia. Por ejemplo, un vuelo a Miami o Madrid con BoA es competitivo frente a gigantes del sector, y esos ingresos nos permiten seguir subsidiando rutas como Trinidad-Cochabamba, esenciales para la población.

-¿Hay planes para expandir esta presencia?  

-“Sí, estamos negociando con China la adquisición de cuatro aviones adicionales para rutas internacionales y seis para nacionales. Esto nos permitirá ampliar destinos y frecuencias, fortaleciendo nuestra posición como una aerolínea pública que compite globalmente sin perder su esencia social”.

-¿Cómo se prepara BoA para este crecimiento? 

-“Nuestro nuevo hangar, en proceso de certificación con Airbus y Boeing, no solo atenderá nuestra flota, sino que podrá dar servicio a otras aerolíneas, generando ingresos adicionales. Esto, junto con la capacitación de personal local, nos posiciona como un referente en la región”.

-Para cerrar, ¿cuál es el mensaje que BoA quiere transmitir a los bolivianos?  

-Que somos más que una aerolínea: somos un servicio público que conecta vidas, impulsa el desarrollo y demuestra que una empresa estatal puede ser eficiente y rentable. Subsidiar casi el 50% del costo de los pasajes nacionales no es solo una cifra, es un compromiso con la equidad y el progreso de Bolivia.

Fuente: lostiempos.com


×