En tiempos donde cada mensaje, llamada o foto compartida, parece estar bajo lupa, Signal ha ganado popularidad como uno de los mensajeros más seguros del mercado. Desde wwwhatsnew.com lo hemos mencionado en múltiples ocasiones como una alternativa confiable para quienes desean proteger su privacidad digital. Sin embargo, como toda herramienta tecnológica, tiene sus fortalezas y también sus limitaciones.
Lo ocurrido recientemente con un grupo de funcionarios del gobierno estadounidense, que discutían temas militares confidenciales en un chat de Signal, es un recordatorio claro de que incluso las plataformas cifradas no son un escudo infalible frente a los errores humanos o amenazas más sofisticadas.
¿Qué es Signal y por qué se considera tan seguro?
Signal es una aplicación de mensajería gratuita y de código abierto que utiliza cifrado de extremo a extremo para proteger tus comunicaciones. En términos simples, eso significa que solo tú y la persona con la que estás hablando pueden leer lo que se envía, sin que nadie más —ni siquiera Signal— tenga acceso a los contenidos.
Esto lo convierte en una herramienta ideal para quienes valoran la confidencialidad: desde activistas y periodistas hasta cualquier usuario que quiera evitar que sus mensajes puedan ser interceptados o analizados por terceros.
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Entre sus funciones destacadas están:
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Mensajes que desaparecen automáticamente, tras el tiempo que tú determines.
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Difuminado de rostros en fotos, útil en protestas o situaciones delicadas.
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Ocultación del número de teléfono, que mejora el anonimato.
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Protección contra capturas de pantalla (en algunos dispositivos).
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Verificación de identidad mediante un número de seguridad compartido.
Todo esto, respaldado por organizaciones como la Electronic Frontier Foundation, ha posicionado a Signal como una referencia en privacidad digital.
¿Entonces por qué no sirve para todo?
Aquí es donde debemos hacer una distinción clara: Signal es privado, pero no invulnerable. El hecho de que tus mensajes estén cifrados no significa que toda la cadena de seguridad esté libre de fallos.
Volvamos al caso mencionado al inicio. Un grupo de altos funcionarios del gobierno de EE. UU. discutía planes militares en un grupo de Signal. Por alguna razón, el editor en jefe de The Atlantic fue agregado a esa conversación. Imagínate estar en una reunión confidencial y que, de pronto, se siente en la sala alguien a quien nadie invitó. Eso fue, esencialmente, lo que ocurrió.
Desde wwwhatsnew.com consideramos que este tipo de situaciones evidencian que el riesgo muchas veces no está en la app, sino en cómo la usamos.
Riesgos que debes considerar si usas Signal
A pesar de sus buenas prácticas de seguridad, Signal no puede protegerte de todo. Aquí algunos puntos clave a tener en cuenta:
Cualquiera puede ser agregado a un grupo, si no configuras límites
De forma predeterminada, cualquier miembro puede añadir a otras personas a un grupo. Es crucial activar las opciones que requieren aprobación para nuevos integrantes y limitar quién puede invitar a otros. Si vas a compartir información sensible, asegúrate de que conoces —y has verificado— a cada participante.
Tu teléfono puede ser el eslabón débil
Signal protege los datos mientras se transmiten, pero si tu dispositivo ha sido infectado con spyware o malware, los mensajes pueden ser leídos antes incluso de ser cifrados o después de ser descifrados. Apple ha advertido sobre campañas de espionaje contra usuarios en más de 150 países, especialmente figuras públicas, periodistas y activistas. Si tu teléfono está comprometido, ni el mejor cifrado podrá ayudarte.
Usarlo en múltiples dispositivos puede abrir nuevas puertas
Signal permite que sincronices tu cuenta en una computadora, lo que es muy cómodo. Pero, si ese equipo no tiene la misma protección que tu móvil —por ejemplo, sin contraseña o sin antivirus actualizado— puede convertirse en una entrada peligrosa para intrusos.
El dispositivo físico puede ser robado
Aunque uses todas las funciones de privacidad de Signal, si alguien accede a tu móvil desbloqueado, puede leer tus mensajes sin ninguna barrera. Por eso, los mensajes autodestructivos son una medida muy útil, especialmente en entornos de riesgo.
No está pensado para manejar información clasificada
El propio gobierno de EE. UU. prohíbe el uso de Signal para comunicarse sobre información clasificada. Y no es porque la app no sea segura, sino porque las amenazas de seguridad nacional requieren otro nivel de protección, como redes internas cerradas y dispositivos controlados.
¿Cómo usar Signal de forma responsable?
Desde wwwhatsnew.com siempre insistimos en que la privacidad digital es como la salud: requiere prevención, hábitos y conocimiento. Aquí algunos consejos prácticos si vas a usar Signal:
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Verifica la identidad de tus contactos con el número de seguridad.
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Activa la aprobación de nuevos miembros en grupos.
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Usa mensajes que desaparecen como norma general.
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Mantén tu dispositivo actualizado y protegido con contraseña.
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Evita hablar de temas críticos en plataformas públicas, por seguras que sean.
Yo creo que Signal sigue siendo una de las mejores herramientas que existen para proteger tus conversaciones. Pero no es un escudo mágico. Usarla con criterio y saber sus limitaciones es tan importante como instalarla.
Privacidad: un equilibrio entre tecnología y sentido común
En tecnología, la privacidad nunca es un estado absoluto, sino un equilibrio entre las herramientas que usamos y cómo las usamos. Signal ofrece un alto estándar de privacidad, pero no puede protegernos de errores humanos, dispositivos comprometidos o decisiones imprudentes.
Tal como ocurre con una caja fuerte: puede ser muy resistente, pero si dejas la puerta entreabierta o compartes la combinación con cualquiera, pierde gran parte de su utilidad.
En WWWhatsnew.com seguiremos recomendando herramientas como Signal, pero siempre acompañadas de una mirada crítica y práctica. La clave está en entender qué nos ofrecen, qué no, y cómo podemos complementar su uso con buenos hábitos digitales.
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