Tres meses sin merienda escolar: «Con Bs 1, mi desayuno es una pipoca»


Santa Cruz. Estudiantes, maestros y padres de familia reclaman por el retraso en la entrega de las raciones alimenticias que provee el Gobierno Municipal. El alcalde asegura que esta semana se firmará el contrato para empezar la distribución en las escuelas

Deisy Ortiz Duran


Fuente: eldeber.com.bo



Por un pequeño agujero del portón, Yanine, una niña de diez años, se da modos para comprar media bolsa de picoca a la vendedora que, desde fuera, le alcanza por solo Bs 1. Ese es el desayuno de Yanine casi todos los días, lo único que tiene para llenar el estómago y enfrentar las cuatro horas de clase.

“Me dan un Bs 1 para mi recreo y me alcanza solo para una pipoca, porque mi papá no tiene para más”, dice mientras sostiene con sus pequeñas manos el puñado de maíz que acompaña sus mañanas.
Los niños no entienden de procesos burocráticos, pero sienten la falta del desayuno escolar porque es el tercer mes de clases que no reciben la alimentación complementaria. Todos los días preguntan a la profesora por qué la directora no les reparte.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

escuela

 

La maestra Nancy Chávez hace malabares para que los chicos del prekínder tengan algo que comer. Pasan clases en un ambiente precario. Foto: Deisy Ortiz

Tundy es una escuela considerada del área dispersa, donde llegan estudiantes de urbanizaciones que están entre uno y cinco kilómetros, por lo que muchos madrugan para llegar a tiempo a la hora de ingreso, por eso no alcanzan a desayunar. Y los papás no tienen el suficiente presupuesto para darle más que para pipocas o algunas masitas que cuestan Bs 1.

En algunos casos, los padres preparan la merienda y los niños comparten con sus compañeros.
En prekínder, la maestra Nancy Chávez hace malabares cada mañana para que sus pequeños alumnos tengan algo que comer. Lleva lo que puede y los niños comparten sus meriendas con sus compañeros. “Los niños no entienden que no hay. Extrañan el desayuno escolar. Algunos llegan sin desayunar y lo primero que hacen es buscar algo para comer”, comenta.

La clase se desarrolla en un aula improvisada de apenas tres por tres metros, habilitada gracias al esfuerzo de los padres de familia. Allí caben quince niños sentados alrededor de mesas acomodadas una junto a la otra. Una pizarra desgastada, donada, sirve para que la maestra dicte sus clases.

Es un ambiente con paredes de venesta y lleno de huecos, por donde el frío y el viento se cuelan. “Es muy triste, se han olvidado de nosotros. Todo esto ha sido levantado por el esfuerzo de los papás”, lamenta la profesora, quien pide que se construyan aulas para los niños y que doten del desayuno escolar, que hasta ahora no ha llegado.

La directora Elena Cabral cuenta que, cada día, los estudiantes le preguntan cuándo comenzarán a distribuir el desayuno escolar, pero no tiene una respuesta que darles. En sus 26 años como maestra en esa unidad educativa, es la primera vez que presencia un retraso tan largo.

maestras

 

La directora atiende a los padres en el pasillo, por falta de ambiente. Foto: Deisy Ortiz

 

La preocupación también alcanza a los padres de familia, quienes ya sostuvieron una reunión con el subalcalde para exigir una solución. No descartan iniciar medidas de presión si el problema persiste. En esta escuela estudian 284 alumnos que, como en los colegios de la ciudad, hasta ahora siguen esperando el desayuno.
La presidenta de la junta escolar, Janeth Aramayo, dice que en zonas dispersas la alimentación complementaria es muy necesaria. “Hay niños que se vienen temprano y madrugan, y el desayuno escolar alivia un poco”, dice. 

“Los niños piden que llegue la merienda”, comenta el hijo de Sara Aranco. El niño cursa cuarto grado en el colegio San Juan del Este y ayer se encontraba haciendo su tarea con la ayuda de su mamá. Sobre su mesa tenía los materiales entregados por la Alcaldía, entre ellos cuaderno, caja de colores, marcadores, borrador, tajador y una regla. Aunque estos útiles ayudan en sus clases, lo que más espera, como muchos de sus compañeros, es la merienda, dice Aranco.

En los quioscos de los colegios también hacen lo posible por ofrecer alimentos al alcance de los niños, porque saben que la crisis está golpeando a los padres de familia. Hay masitas, empanadas chicas y dulces desde Bs 1.

Proceso de licitación

El alcalde Jhonny Fernández remarcó que esta semana se firmará el contrato para empezar la distribución, pero que en estos primeros meses de clases se han entregado 220.000 paquetes de útiles escolares.

Raúl Ascarrunz, director municipal de Educación, señaló que el proceso de licitación para la adjudicación del desayuno escolar está en curso y que, hasta la fecha, ya se presentaron ocho empresas interesadas, a diferencia del pasado mes de noviembre, cuando no hubo proponentes, lo retrasó la dotación de las raciones a los estudiantes. 

De acuerdo con Ascurrunz, se espera que en la brevedad posible ya se pueda distribuir la alimentación complementaria a los más de 370.000 estudiantes de inicial, primaria y secundaria.
Confía en que, para mediados de este mes, las empresas ya hayan sido adjudicadas, lo que permitirá dar inicio al proceso de contratación y, posteriormente, la orden de proceder.


×