En esta fecha se resalta la necesidad de revisar las creencias erróneas que obstaculizan el control de esta afección respiratoria grave. La falta de claridad sobre su manejo adecuado deja a muchos sin la atención médica que requieren.
Fuente: Infobae
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El asma afecta a 262 millones de personas en el mundo y causa alrededor de 455.000 muertes anuales, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se trata de una enfermedad crónica caracterizada por una inflamación persistente y un estrechamiento de las vías respiratorias, lo que provoca síntomas como tos, sibilancias, dificultad para respirar y opresión en el pecho.
Aunque se trata de una afección frecuente, sigue rodeada de creencias erróneas que dificultan su diagnóstico, tratamiento y seguimiento. La falta de información precisa hace que muchas personas vivan durante años con síntomas sin saberlo o sin recibir el abordaje adecuado. “Es importante sensibilizar a la opinión pública para aclarar informaciones erróneas y no estigmatizar a las personas asmáticas”, resaltan desde la OMS.
Cada primer martes de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma. Esta fecha busca sensibilizar sobre la importancia de controlar esta patología y mejorar la calidad de vida de quienes la padecen. En este marco, profesionales de la salud enfatizan la necesidad de derribar los mitos más frecuentes sobre la afección. Identificar estos errores no solo es clave para los pacientes, sino también para sus entornos familiares, escolares y laborales.
Los mitos más frecuentes que hay que derribar sobre el asma
Si no hay síntomas, no es necesario realizar un tratamiento
Uno de los errores más comunes es creer que la ausencia de síntomas significa la desaparición de la enfermedad. Pero en el asma, el enemigo muchas veces es invisible: la inflamación de las vías respiratorias puede seguir presente aun cuando no se manifieste clínicamente.
El no asistir a consultas médicas para controlar la afección puede aumentar las posibilidades de que se desarrollen crisis respiratorias a futuro.
Solo hay que medicarse durante una crisis asmática
El uso del inhalador únicamente cuando hay síntomas visibles es otra idea extendida, pero incorrecta. Las guías internacionales recomiendan un enfoque dual: tratamiento de base diario para controlar la inflamación, y medicación de rescate para momentos puntuales.
“La prevención y el control a largo plazo son la clave para detener los ataques de asma antes de que comiencen”, comentan desde la Mayo Clinic. El enfoque tardío no solo expone a complicaciones, sino que refuerza el círculo de subestimación del asma como enfermedad episódica.
El asma desaparece con el tiempo en la mayoría de los casos
Aunque en algunos casos, los síntomas de los niños pueden atenuarse al pasar los años, esto no implica que la enfermedad haya desaparecido. Puede quedar “dormida” y reactivarse en la adultez, especialmente ante factores ambientales o infecciosos.
El asma es una afección exclusiva de la infancia
Es común pensar que el asma solo afecta a los niños, pero esta creencia contribuye a la dificultad para diagnosticar la enfermedad en adultos. Aunque tiene una mayor prevalencia en la infancia, no es solo de los más jóvenes.
De hecho, los síntomas pueden aparecer por primera vez en la adultez, a menudo confundidos con otros trastornos respiratorios. Esta confusión lleva a una detección tardía, lo que dificulta el tratamiento y control adecuados.
Es importante que las personas con síntomas recurran a especialistas, como neumonólogos o alergistas, que puedan ajustar el tratamiento según las necesidades del paciente y prevenir complicaciones graves.
Las personas asmáticas deben evitar todo tipo de ejercicio
El miedo a que la actividad física desencadene una crisis lleva a muchos a adoptar el sedentarismo. No obstante, con el asma controlada, el ejercicio no solo es posible, sino recomendable. Mejora la capacidad pulmonar y la salud cardiovascular.
“De hecho, el ejercicio mejora la capacidad respiratoria y la calidad de vida. Existen estrategias médicas para prevenir los síntomas durante la actividad”, explicó el Dr. Ricardo Del Olmo, médico neumonólogo, Jefe de Departamento de Diagnóstico y Tratamiento del Hospital María Ferrer.
Usar medicamentos a diario puede causar adicción
Una preocupación recurrente es que los inhaladores generen dependencia. Esto es falso. Los medicamentos no generan adicción, y dejar de usarlos por miedo a esto puede tener consecuencias graves. La confusión puede surgir porque se utilizan a diario, pero esto no implica una relación de tipo adictiva.
El asma es una condición leve y manejable sin tratamiento médico
Algunas personas piensan que es solo una molestia menor. Sin embargo, cuando no está bien controlado, puede afectar múltiples áreas de la vida.
Los expertos de la OMS lo expresaron de la siguiente manera: “Si no se trata correctamente, puede causar trastornos del sueño, cansancio durante el día y problemas de concentración. Además, las personas asmáticas y sus familiares se ausentan a veces de la escuela y el trabajo, lo cual tiene repercusiones económicas para la familia y la sociedad en general”.
En Argentina, según la Asociación Argentina de Pacientes con Asma (AAPA):
- Se estima que el asma tiene una prevalencia de 10%.
- Solo el 50% de quienes tienen esta afección están diagnosticados
- La enfermedad es responsable de 400 muertes y 15.000 internaciones al año.
El asma es una alergia más
Aunque puede estar relacionada con alergias, en realidad es una enfermedad crónica que involucra una inflamación persistente de las vías respiratorias. En muchos casos, el sistema inmunológico reacciona de forma exagerada a ciertos desencadenantes, lo que provoca que las vías respiratorias se inflamen y se estrechen.
Este proceso es conocido como inflamación tipo 2, y en él participan proteínas específicas que agravan la obstrucción de las vías respiratorias, lo que dificulta la respiración.
Diagnosticar asma requiere pruebas incómodas e invasivas
El diagnóstico del asma no requiere estudios complicados. Se realiza mediante historia clínica, examen físico y una prueba sencilla llamada espirometría.
Según los expertos de Mayo Clinic, “esta prueba ofrece estimaciones sobre el estrechamiento de los bronquios al verificar la cantidad de aire que puedes exhalar después de una inhalación profunda, así como la rapidez con la que puedes exhalar”.
La OMS también destaca que el diagnóstico temprano y accesible es una de las claves para disminuir las complicaciones de la enfermedad, especialmente en países con menor acceso a la salud.
El asma puede curarse completamente con el tiempo
El asma no tiene una cura definitiva, pero puede controlarse con eficacia. Muchas personas logran vivir sin síntomas ni restricciones mediante un tratamiento bien ajustado.
Como explican desde Mayo Clinic: “El asma no tiene cura, pero sus síntomas pueden controlarse. Dado que el asma suele cambiar con el tiempo, es importante que colabores con el médico para hacer un seguimiento de los signos y los síntomas y ajustar el tratamiento según sea necesario”.
En este sentido, el objetivo no es eliminar la enfermedad, sino impedir que interfiera en la vida cotidiana.