El exvicepresidente, que gobernó con Evo durante 14 años, dijo que ahora intenta posicionar debates desde su alejamiento de la política boliviana.
Fuente: ANF / La Paz
El expresidente Álvaro García Linera aseguró que no quiere hablar con Evo Morales y Luis Arce porque le aburren; sin embargo, dijo que intenta posicionar debates desde su alejamiento de la política boliviana.
El exguerrillero y exvicepresidente de Morales accedió a una entrevista en un programa argentino donde se refirió a la crisis económica que sufre el país por la mala administración de los gobiernos del Movimiento Al Socialismo.
“Me aburren los dos. No hablo porque no quiero hablar con ellos, pero intento desde mi lugar de una persona que ha sumido su vida a la emancipación, ir proponiendo otros ejes de debate, aunque eso me provoque enemistades”, dijo García Linera.
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A pensar de la situación en la que dejó el país por imponer su modelo económico, el exmandatario insistió en que se debe realizar un control del comercio exterior, mantener la subvención de carburantes y otros productos de necesidad elemental, subir los impuestos a los ricos y mantener las empresas públicas.
“La gente está decepcionada de ver acusaciones entre compañeros. Eso no le importa a la gente, eso le importa al activista”, sostuvo el exvicepresidente.
En las últimas semanas, se acusó al exjefe de Estado de estar detrás de la candidatura de Andrónico Rodríguez porque eligió como parte de su binomio a Mariana Prado, exjefa de gabinete de García Linera.
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