Arce defiende su legado y acusa a Morales de dividir al oficialismo de cara los comicios


El presidente de Bolivia, Luis Arce, aseguró que su principal legado al concluir su mandato será la preservación de la democracia, y acusó al exmandatario Evo Morales de dividir al oficialismo de cara las presidenciales de agosto.

El presidente Luis Arce. Foto: Archivo ABI

 

Fuente: Brújula Digital



El presidente de Bolivia, Luis Arce, aseguró a EFE que su principal legado al concluir su mandato será la preservación de la democracia, y acusó al exmandatario Evo Morales (2006-2019) de dividir al oficialismo de cara las presidenciales de agosto.

“Hemos soportado todas las movilizaciones del señor Evo Morales (…) hemos resistido todo para preservar la democracia. El pueblo boliviano se merecía un tránsito democrático y nuestro Gobierno entregó ese tránsito democrático”, sostuvo.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

El gobernante destacó que su Gobierno obedeció el “mandato” que emergió de las urnas a finales de 2020 y que consiguió preservar la democracia “por sobre todas las cosas”, y que en noviembre de este año entregará la Presidencia “a quien gane las elecciones” del 17 de agosto.

También se refirió al proceso de industrialización del país como «otro legado» de su Administración y afirmó que ningún gobierno “neoliberal” podrá cambiar el «chip» de que en Bolivia se debe industrializar los recursos.

Elecciones en agosto

Arce reafirmó que las elecciones generales “sí” se celebrarán en agosto, pese al riesgo que representó el reciente bloqueo de caminos de dos semanas impulsado por sectores afines a Evo Morales para imponer su candidatura, una medida que dejó cuatro policías y dos civiles muertos.

Enfatizó que durante esas protestas “el verdadero objetivo” de Morales fue “que no haya elecciones” y que utilizó como “pretexto” la situación económica del país, como la inflación y la escasez de dólares y combustibles.

“Él habla de que lo proscribimos. Aquí no hay ninguna proscripción de nadie, aquí hay una restricción constitucional que no lo habilita como candidato, así de simple”, remarcó.

“Han sido momentos muy complicados ocasionados por el apetito personal de una persona”, añadió.

Morales insiste en ser candidato, pese a no contar con partido y a que el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) ratificó recientemente que la reelección solo está permitida “por una única vez de forma continua”, sin posibilidad de un tercer mandato. Morales ya gobernó Bolivia durante tres periodos.

“Víctima” de Morales

Según Arce, su Gobierno ha sido «una víctima del ataque persistente» de Morales desde que asumió el mando del país en noviembre de 2020.

Asimismo, acusó a Morales de ser quien “ha destruido el instrumento político, ha destruido la revolución democrática (y) ha destruido el movimiento popular”, pese a que él decidió renunciar a la reelección para formar un bloque único de izquierda.

“No me entendieron, me contestaron de la peor manera, Evo Morales, Andrónico (Rodríguez, presidente del Senado) y muchos que se negaron a conformar el bloque de unidad. Ojalá que todos ellos no se arrepientan”, indicó.

El oficialismo llegará dividido a las próximas elecciones, con el gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) que postula al exministro de Gobierno Eduardo del Castillo, el presidente del Senado que decidió competir por separado, y Evo Morales, quien insiste en que tiene derecho a ser candidato aunque no fue inscrito y quedó fuera de la papeleta electoral.

Arce admitió que una cuestión pendiente de su Gobierno es no haber ejecutado la orden de aprehensión contra Morales, quien está acusado por trata agravada de personas por supuestamente mantener una relación con una menor de edad con la que tuvo un hijo, cuando él era presidente en 2016.

El gobernante dijo que Morales tiene en el Trópico de Cochabamba, su principal bastión político y sindical, “un equipo armado que lo defiende”, y que el riesgo de aprehenderlo podría derivar en un “enfrentamiento” o un “derramamiento de sangre” que quiere evitar.

En la entrevista, Arce también se refirió a la situación global y al actual conflicto entre Israel e Irán que, a su juicio, podría derivar en una “tercera guerra mundial”.

También calificó como positiva la gestión que inició en 2023 para orientar el comercio exterior boliviano hacia China, ahora su principal socio comercial, lo que —consideró— evitó que Bolivia se viera afectada por las medidas económicas y arancelarias del Gobierno del presidente de EE.UU., Donald Trump. EFE

Fuente: Brújula Digital