Panaderos advierten que la falta de insumos clave pone en riesgo la elaboración del pan más consumido en la ciudad.
Fuente: PAT
En la ciudad de El Alto, la tradicional marraqueta comienza a escasear en los mercados y tiendas de barrio debido a la falta de harina, uno de los principales insumos para su elaboración. Panaderos de distintos distritos reportan una drástica reducción en la producción diaria, lo que provoca que el pan se agote desde las primeras horas de la mañana.
Según panaderos independientes, los costos de los insumos se han disparado y la cadena de abastecimiento no da señales de recuperación.
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La marraqueta, reconocida como uno de los alimentos más tradicionales y consumidos por la población alteña, se ha convertido en un bien escaso, reflejando una crisis más amplia que golpea a sectores esenciales de la economía local.
La situación no solo afecta a los productores, sino también a los consumidores, quienes se ven obligados a madrugar o a pagar precios más altos para conseguir pan fresco.
Mientras tanto, los ciudadanos comienzan a resentir el impacto en sus mesas, en un contexto donde el pan es un componente básico de la alimentación diaria.