Durante el trayecto, los conductores recibieron llamadas telefónicas de individuos que se hicieron pasar por los representantes de la empresa importadora. Mediante engaños, les indicaron que debían detenerse en puntos específicos y descargar la mercancía.
Charles Muñoz Flores
Fuente: Red Uno
Una banda criminal logró desviar y robar materiales de ferretería valuados en más de un millón de bolivianos, en un hecho que presuntamente fue orquestado desde el penal de Palmasola. La Policía y la Fiscalía ya aprehendieron a tres personas implicadas.
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Según la denuncia, la empresa afectada importó bobinas de acero y perfiles metálicos desde Perú, los cuales llegaron a la ciudad de El Alto y fueron cargados en tres camiones con destino a Santa Cruz. Durante el trayecto, los conductores recibieron llamadas telefónicas de individuos que se hicieron pasar por los representantes de la compañía importadora. Mediante engaños, les indicaron que debían detenerse en puntos específicos y descargar la mercancía.
“Venían tres tráileres con material completo y el daño todavía no está cuantificado, pero se estima en más de un millón de bolivianos”, explicó Mauricio Rendón, abogado de las víctimas.
Videos registrados muestran el momento en que la carga es descargada y desviada hacia otro destino. En las imágenes aparece un hombre que, de acuerdo con las investigaciones preliminares, sería un cómplice directo de los organizadores del ilícito.
Rendón sostuvo que existen indicios de que la operación se dirigió desde Palmasola, donde presuntamente internos con acceso a teléfonos celulares coordinaron cada detalle. “Aparentemente son personas que están con detención preventiva en Palmasola, desde donde estarían operando”, añadió.
El caso se mantiene en investigación, mientras se busca identificar a otros involucrados y recuperar la carga sustraída. Las autoridades no descartan que se trate de una red criminal con ramificaciones dentro y fuera de los centros penitenciarios.