Las autoridades iraníes ejecutaron el miércoles a cuatro personas más condenadas por espionaje en favor del Mossad israelí, intensificando una campaña de represión contra supuestos colaboradores de Israel tras el alto el fuego que puso fin a más de diez días de intenso conflicto militar.
Fuente: Infobae
El alto el fuego entre Israel e Irán, mediado por Estados Unidos, entró en vigor el lunes tras una escalada que incluyó ataques israelíes contra instalaciones nucleares iraníes.
El sistema judicial iraní identificó a tres de los ejecutados como Idris Alí, Azad Shojaei y Rasul Ahmad, quienes fueron ahorcados en una prisión en Urmiá, provincia del noroeste del país. Según las autoridades, los condenados intentaron “importar equipamiento para asesinar a altos cargos” bajo el pretexto de un envío falso de bebidas alcohólicas, acusaciones que llevaron al asesinato de una persona no identificada. Las ejecuciones forman parte de lo que Teherán denomina “acciones decisivas contra agentes del régimen sionista”.
La cuarta ejecución correspondió a Mohamad Amín Mahdavi Shayesté, acusado de gestionar una red informática bajo dirección del Mossad. Estas ejecuciones se suman a una serie de ahorcamientos de presuntos espías israelíes en las últimas semanas, mientras Irán intensifica la persecución de supuestas redes de espionaje tras el conflicto que escaló el 13 de junio con la ofensiva militar israelí.