Un proyectil atravesó una de las ventanas del vehículo y estuvo a centímetros de impactar directamente en la cabeza del conductor.
Ligia Portillo
Fuente: Red Uno
El Club Blooming vivió momentos de terror la noche del lunes, luego de sufrir un atentado armado mientras su bus se retiraba de la ciudad de Montero. El hecho ocurrió tras el partido contra Guabirá, donde el equipo cruceño logró una victoria.
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Según declaraciones preliminares, un proyectil atravesó una de las ventanas del vehículo y estuvo a centímetros de impactar directamente en la cabeza del conductor y del preparador de arqueros. Afortunadamente, no se registraron heridos, pero el susto y la tensión entre los integrantes del plantel fueron evidentes.
La denuncia ya fue formalmente presentada ante la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), que inició las investigaciones correspondientes para dar con los responsables de este ataque que pudo terminar en tragedia.
“Fue un disparo que pasó peligrosamente cerca del conductor. Pudo ser fatal”, señaló un miembro del cuerpo técnico, aún conmocionado.
El club Blooming expresó su preocupación y exigió garantías para la seguridad de sus jugadores y cuerpo técnico en sus desplazamientos. Este hecho reaviva la discusión sobre la violencia en el fútbol boliviano y la necesidad urgente de reforzar la protección en los eventos deportivos, tanto dentro como fuera del campo.
Las autoridades no descartan ninguna hipótesis y se están revisando cámaras de seguridad del trayecto y tomando declaraciones a testigos. Por ahora, la prioridad es esclarecer el atentado y evitar que un episodio de esta magnitud se repita.
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