La Academia cruceña se impuso a Guabirá (2-1) con goles de Villarroel y Posse, y sigue firme en la parte alta de la tabla. Rafinha descontó para el Rojo.
Fuente: El Deber
Blooming venció 2-1 a Guabirá este lunes en el estadio Gilberto Parada de Montero, donde ofició como local por efecto de recaudación. Los goles del triunfo fueron anotados por Moisés Villarroel y Franco Posse, mientras que Rafinha descontó, de penal, para el Rojo montereño.
La academia cruceña, suma 28 puntos, y se ubica en el tercer lugar de la tabla de posiciones, consolidando su gran presente en la División Profesional. Guabirá, por su parte, vuelve a encender las alarmas: es noveno con 16 unidades y volvió a mostrar imprecisión en su juego.
Desde el primer minuto, el partido fue de ida y vuelta. Ambos planteles salieron con intensidad en busca del gol: Blooming con la presión de hacer valer su localía con su gente, y Guabirá motivado por jugar en casa. Sin embargo, la falta de precisión en los últimos metros impidió que el marcador se abra temprano.
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A los 23 minutos llegó la apertura del marcador. Un ataque celeste por derecha encontró solo a Franco Posse en tres cuartos de cancha. El uruguayo abrió el juego para Guilmar Centella, quien vio el desmarque de Vadalá y le filtró un pase. El argentino mandó un centro rasante al área chica que Moisés Villarroel aprovechó para anotar el 1-0.
La Academia cruceña era más en la cancha. Con buen manejo del balón, buscaba ampliar la ventaja ante un Guabirá que lucía tímido y con pocas ideas en ofensiva. El primer tiempo terminó sin mayores sobresaltos.
En el complemento, Blooming mantuvo su intensidad. Apenas a los 49 minutos, Martín Alaníz tomó el balón en tres cuartos de cancha, levantó la cabeza y filtró un pase perfecto al espacio para Franco Posse. El delantero uruguayo ingresó al área y definió para el 2-0 ante la débil respuesta del arquero Cuéllar.
A Guabirá le costaba mucho sostener el ritmo del partido. Sin embargo, en una de sus pocas aproximaciones, encontró el descuento. Yuto Baigorria encaró por izquierda, se sacó la marca de dos rivales y envió un centro que pegó en la mano de Marc Enoumba. El árbitro no dudó y sancionó penal, que fue bien ejecutado por Rafinha al palo izquierdo de Uraezaña. El meta se lanzó pero no alcanzó a detener el disparo.
El partido volvió a ganar intensidad, con ambos equipos buscando el gol que defina o iguale el marcador. Sin embargo, el resultado no se movió más. Blooming se quedó con tres puntos valiosos que lo mantienen en la lucha por los primeros lugares del torneo.