La Gobernación cruceña no tiene Plan B para atender demandas del sector salud y el paro continúa este miércoles


La Gobernación cruceña admitió que no tiene otra alternativa para proponerle al sector salud, mas que pedirle que espere entre 30 a 45 días para atender sus demandas

Ariel Melgar Cabrera



Fuente: eldeber.com.bo

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Este miércoles el paro de 72 horas del sector salud cumple su segundo día sin avances en la negociación con la Gobernación cruceña. La administración departamental reconoce que no existe un plan alternativo inmediato para pagar el bono de vacunación que exigen los trabajadores movilizados y advierte que la falta de liquidez afecta a todas las gobernaciones del país.

“Esta semana no hemos tenido ningún acercamiento. La semana pasada hicimos una oferta para resolver el pago del bono, pero fue rechazada”, señaló el secretario departamental de Salud, Marcelo Kramer Catalán, en entrevista con EL DEBER.

Kramer explicó que la única solución para pagar los bonos de vacunación a los trabajadores de salud es llegar a una conciliación de cuentas con el Ministerio de Salud, trámite que requiere 30 a 45 días y la aprobación de la Asamblea Legislativa Departamental, debido al cambio de fuente de financiamiento.

El secretario insistió en que ninguna gobernación del país ha logrado pagar el bono, ya que los recursos del IDH (Impuesto Directo a los Hidrocarburos), de donde se financia esta obligación, fueron recortados “de forma alarmante” por el Gobierno central. “Sí, vamos a pagar, pero necesitamos un poco de tiempo”, sostuvo.

Pacientes sin atención

Mientras tanto, miles de pacientes quedan sin atención médica y con consultas reprogramadas para semanas después. Tal es el caso de Karen Ureña, quien llegó a esta mañana al Hospital Japonés con su madre de 80 años, que no puede caminar, para una cita con el traumatólogo.

“Esperamos tres horas en un taxi para que nos reprogramaran, pero no conseguimos ficha. Tenemos que volver a sacar ficha en agosto, nos dijeron. Imagínese, hasta eso ya mi madre se muere”, lamentó.

Su madre padece de artrosis y afecciones cardíacas, por lo que el retraso en la atención la coloca en una situación crítica. “Da rabia verla así, desamparada”, añadió Karen, visiblemente afectada.

Una situación similar vivió Maribel Putaré, de 60 años, quien llegó desde el municipio de Concepción para una cita en cardiología. “Me lo han reprogramado para el 25 de julio. Vengo de lejos y me llevo esta sorpresa (del paro), ¿cómo es posible?”, cuestionó.

Otras personas ni siquiera lograron nueva fecha. “Gasté más de 400 bolivianos para venir y no hay reprogramación. La doctora me dijo que no hay atención. No puede ser que sean tan incapaces”, reclamó otra paciente frustrada, quien no quiso dar su nombre.

La protesta de los trabajadores de salud paraliza consultas externas, cirugías programadas y servicios de laboratorio, dejando a cientos de pacientes sin opción más que esperar o postergar tratamientos cruciales. Aún quedan dos días más de paro y el malestar crece.

Paro en plena emergencia 

Este paro ocurre mientras Santa Cruz lidera los contagios en el brote de sarampión, situación que ha provocado inquietud en la población por las posibles consecuencias en los servicios de salud pública.

Según el comunicado oficial de la Federación, los trabajadores de salud exigen: el pago del bono de vacunación, solución a la deuda con el Banco de Sangre, reposición de ítems y contratos municipales, refacciones urgentes en hospitales de tercer nivel, suministro de medicamentos e insumos básicos y pago de sueldos a personal contratado.

El bono de vacunación es un beneficio anual incluido en el presupuesto, pero la Gobernación pidió entre 35 a 45 días de plazo para su pago, propuesta rechazada por los trabajadores.

Kramer también alertó sobre los casos de sarampión y coqueluche que se incrementan en el departamento cruceño. Dijo que hay 126 casos confirmados de sarampión y que, pese a la disponibilidad de vacunas, la asistencia a los centros de salud es baja.

“Vamos a tener que implementar un plan más agresivo, ir colegio por colegio, barrio por barrio, si es necesario”, anunció, pidiendo conciencia a los padres.

El conflicto de salud continúa sin solución y los pacientes siguen pagando el precio de una crisis estructural sin respuestas inmediatas.