Observadores de la UE


La Unión Unión Europea desde 1993 ha iniciado una marcada tendencia y avance en las democracias del mundo en procesos electorales. Su enfoque le ha permitido observar y evaluar los procesos electorales con expertos por corto y largo plazo, respetando la autonomía e independencia de los Estados.

La recepción en el ámbito interno en la región latinoamericana, y Bolivia en particular, ha sido considerada por los distintos gobiernos como positiva la labor de las Misiones de Observadores de la Unión Europea (MOE UE), donde se ha pasado de una recepción protocolar a una interacción sustantiva de fortalecimiento de la democracia. Y una de las principales manifestaciones de esta interacción se da en momento de hegemonía política y crisis del Tribunal Supremo Electoral.



La Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (MOE UE) constituida por 11 personas en principio y 32, luego con el anuncio de ser ampliada a 100 inclusive, se halla presidiario por el euro diputado Davor Stier de nacionalidad croata, y como jefe Adjunto Alexandre Gray.

Según el Manual de Observación Electoral de la Unión Europea las misiones evalúan de manera exhaustiva todos los aspectos de un proceso electoral teniendo como referencia estándares internacionales. La aplicación de esos estándares permite fortalecer las instituciones democráticas, fomentar la confianza pública y ayuda a impedir el fraude, la intimidación y la violencia.

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La Unión Europea en su cuenta X señala que los Observadores estarán encargados de observar todo el proceso de organización y realización de las elecciones en cada lugar. La Unión Europea mantiene firme su compromiso con la democracia en Bolivia. Esta afirmación loable debe extenderse en las mesas que se instalarán en el Trópico de Cochabamba donde sufragarán más de 300.000 personas, bastión sin soberanía plena de las seis federaciones de cocaleros dirigidas por el expresidente Evo Morales -prófugo- de la justicia.

Alexandre Gray jefe Adjunto de Observación Electoral de la Unión Europea, afirmó que los miembros de la delegación cuentan con garantías del Órgano Electoral y del gobierno para realizar su trabajo. Adelantó, que el 17 de agosto día de la votación se contará con más de 100 observadores y que los resultados preliminares se darán a conocer el 19 de agosto, semana después se remitir un informe final. Esto quiere decir que el sistema de Transmisión Preliminar de datos (TREP), está plenamente comprobado su funcionamiento, tanto para la primera vuelta o segunda si fuere el caso (Elecciones: 17- 08-25 y 19-10-25)

La Sala Plena del Tribunal Supremo Electoral (TSE) el viernes 18 de julio cumpliendo una de las fases claves del calendario electoral, ha procedido al sorteo público de 7362 jurados electorales para el exterior, los que tendrán la responsabilidad de administrar el control del voto en 1.227 mesas habilitadas en varios países. Allí los Observadores tendrán las mejores condiciones logísticas para que el sufragio sea transparente e impedir que los que desempeñan cargos diplomáticos y personal de esas reparticiones ejerzan presión sobre los migrantes bolivianos como se han denunciado en los períodos anteriores.

De muy importante se califica la presencia de los Observadores de la UE, que in situ han sido testigos del sorteo público en nueve Tribunales Departamentales Electorales de

204.156 jurados electorales, para más de 34.000 mesas de sufragio en todo el país. Vendrán otras fases del proceso entre ellas: la institucionalidad del TSE que de señales de fortaleza, certidumbre y Transparencia en sus actos; prácticas preliminar del TREP para evitar se pare; revisión exhaustiva del padrón electoral para que no sigan votando los resucitados; controlar que el voto no sea -votocentral, subcentral o sindical-; que se manipulen inhabilitaciones exprés desde el TCP o se declaren resultados de ganadores a quienes el soberano democráticamente los rechace en la jornada electoral de 17 de agosto.

Una visión que observamos mejor para el control del proceso electoral donde los órganos del Estado por concentración del poder político no gozan de credibilidad de la ciudadanía y los funcionarios públicos son entendidos como -empleados del gobierno- , y no como servidores públicos, es la acción vital de contrastar la nómina de jurados electorales con las planillas de las instituciones públicas del Estado, con el propósito de despejar cualquier situación de fraude.

Con relación a lo expuesto, el expresidente de Estados Unidos, Jimmy Carter, dice: “Se pueden lograr enormes avances si perseverancia ante desafíos difíciles».

Pedro Gareca Perales

Santa Cruz, julio 25 de 2025