El mercado define precio de productos a pesar de controles


Los productos de la canasta familiar subieron entre 30% a 50%, lo que elevó el costo de vida de las familias bolivianas, debido a la pérdida del poder adquisitivo. También se registró una devaluación de la moneda boliviana en 100%.

El Aceite y el huevo subieron de precio.

 

Fuente: El Diario



Los productos de la canasta familiar subieron de precio y los controles aplicados por el Gobierno no frenaron el alza, sino que el mercado se encargó de fijar el valor de los artículos de primera necesidad, de acuerdo a la oferta y la demanda.

En marzo, los medios indicaban que los precios de los principales productos de la canasta familiar, como el pollo, subió en más del 50%, mientras que la carne oscilaba entre 39% a 45%, el ajo en 60% y el arroz 57%.

=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas

Actualmente, en el mercado nacional el huevo que antes estaba por debajo de los 30 bolivianos el maple, ahora, el más económico se puede adquirir en Bs 33; el pollo que estaba el kilo entre Bs 18 a 19, ahora oscila entre 21 a 22 bolivianos.

La carne, que antes las amas de casa podían conseguir una cuarta de molida entre 7 a 8 hasta 10 bolivianos, ahora el producto está por encima de los 13 bolivianos, ni que decir de la pulpa que está por encima de los 15 bolivianos.

Entretanto, el aceite que costaba a 14 bolivianos el litro, ahora está por encima de los 20 bolivianos y los fideos subieron en 50%, así como las verduras.

Dólar

A pesar del freno a las exportaciones de carne, de azúcar, de soya y de aceite, estos productos igual subieron de precio debido a que el tipo de cambio oficial del dólar ya no hay en el mercado nacional, y los bolivianos acuden al paralelo, a un precio de 14 bolivianos, cuyo valor varía en los días.

El ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, a la pregunta de un colega periodista, el pasado jueves, de que la Cámara de la Industria Farmacéutica Boliviana (Cifabol) adquiere dólares del Banco Unión a un precio elevado, en un 130%, dijo que la entidad adquiere la divisa a 14, 12 o 13 bolivianos en el mercado paralelo y en función de eso se los vende al precio más bajo posible.

Para el economista Fernando Romero, esa operación muestra que el Banco Central de Bolivia (BCB) no tiene la cantidad suficiente de divisas para cubrir la demanda del mercado interno, lo que provoca que el que tiene la moneda estadounidense pueda fijar el valor del mismo.

Fue claro en señalar que la población al no encontrar dólares el tipo de cambio oficial en el sistema financiero, deba acudir al paralelo, hasta el dólar virtual USDT, para cubrir sus operaciones o gastos personales.

Al respecto, el economista Darío Monasterio indicó que prácticamente el dólar oficial ya no existe, porque ya no es sostenible el valor de venta, y se muestra en la operación que realiza el Banco Unión, que compra a 14 bolivianos y lo vende a casi 16 bolivianos, es decir a un 130%, obteniendo una ganancia en la colocación de la moneda.

Además, recordó la fórmula para el cobro de comisiones que la entidad reguladora estableció, tomó en cuenta el valor del dólar paralelo, que implica una mayor comisión de cobro para empresas y personas.

Sostuvo que hay una devaluación de facto debido a que no hay dólares en el sistema financiero, o por lo menos la cantidad que demandan las personas, por ello se requiere un cambio profundo en la política económica, que implica un nuevo modelo económico que dé certidumbre a las actividades económicas y se pueda crecer nuevamente.

Intervención, oferta y demanda

El incremento de precios de los productos es provocado por la intervención del Gobierno, debido a que no puede controlar la oferta y demanda, a productores y consumidores, así como el dólar, que sólo generó un mercado negro.

Paralelamente, los precios de los productos también suben en el mercado informal. La única forma de frenar la inflación es a través de la libre oferta y demanda, así como menos intervencionismo del Gobierno, expresó Monasterio.

El entrevistado señaló que se debe facilitar el negocio, la producción y la oferta se encargará de regular los precios.

“Imposible controlar en una economía libre”, resaltó y agregó que el Gobierno promovió la informalidad, los productores y consumidores salen del mercado formal y entran a uno negro, es más difícil controlar el precio.

Según Romero, es un hecho que los productos subieron de precio a pesar de la subvención a carburantes y alimentos, y por ello la nueva gestión de gobierno que venga, luego de las elecciones, deberá estabilizar la economía y retirar las políticas establecidas por la actual administración del Estado.

Es decir, anular el control de precios y el tipo de cambio fijo, ya que estas medidas sólo distorsionan el mercado. “Por lo tanto, no veo en el corto plazo una restructuración de estos factores, además, no solo tienen un impacto económico, sino también político y social”, apuntó.
Asimismo, advirtió que iniciar una gestión con despidos masivos y eliminación de la subvención, tendrá efectos económicos, pero también sociales, por la reducción del gasto público.

Sin embargo, planteó un modelo mixto, ya que se debe regular los excesos de la libre oferta y demanda, así como la informalidad.

Inflación

De acuerdo con información del Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación acumulada de enero a junio llegó a 15,53%, cuya cifra supera a lo estimado por el Gobierno en su Presupuesto General del Estado (PGE) 2025, de 7,5%.

La entidad estatal argumentó que la cifra fue provocada por los bloqueos registrados entre mayo y junio, que generaron desabastecimiento de productos básicos y una ola especulativa en los mercados del país.

Fuente: El Diario