En el clásico, el Alvinegro vio reaparecer la situación, encendiendo la alerta por la pelota muerta defensiva.
Fuente: Globo G1
La eliminación del derbi reforzó un problema que el Atlético-MG ha enfrentado desde el inicio de la temporada: las jugadas a balón parado. De los últimos diez goles encajados por el Atlético-MG, cinco fueron a balón parado.
Solo en los cuartos de final de la Copa de Brasil, tres de los cuatro goles fueron a balón parado. En algunas situaciones, la defensa alvinegro dejó espacio en el segundo balón, permitiendo que la posesión se mantuviera viva en el área. En otras, vieron al defensa cabecear con libertad.
En total, fueron cinco goles, a balón parado, de los últimos 10 goles encajados por Galo:
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Atlético 1 x 3 Grêmio: un gol de tiro libre, dos de jugadas a balón parado (dos corners).
São Paulo 2 x 0 Atlético: dos goles desde el balón rodando.
Atlético 0 x 2 Cruzeiro: un gol de lanzamiento de bola, un gol de tiro de esquina
Vitória 1 x 0 Atlético: gol de balón rodante.
Cruzeiro 2 x 0 Atlético: dos goles a balón parado (tiro libre y córner)
El problema está en la mira de Jorge Sampaoli. Incluso reveló que trabajó en jugadas a balón parado durante la semana. Sin embargo, aún tiene muchos ajustes por hacer.
— Sí, creemos que es un problema. Estamos trabajando en ello, intentando crear una defensa mixta (individual y marcaje colectivo). Es un aspecto en el que tenemos que trabajar mucho. Necesitamos controlar este aspecto.
—Intentamos estimular la concentración y la atención. Hay jugadas a balón parado, un segundo balón. Se trata más de la atención.
El próximo reto para intentar mejorar en este aspecto es el domingo. El Atlético recibe al Santos en el Arena MRV a las 16:00 (hora de Brasilia) en un partido válido por el Campeonato Brasileño.