El exdelantero del Botafogo es el jugador más ovacionado por la afición en la victoria ante Chile, en el primer partido del técnico Carlo Ancelotti en el principal estadio de la selección brasileña.
Fuente: Globo G1
Lo mejor se guardó para el final. Brasil se despidió de su afición en la fase de clasificación con una victoria por 3-0 sobre Chile en el estadio Maracaná ante poco más de 57.000 espectadores. Los momentos más emocionantes llegaron en la segunda mitad, con la brillante actuación del delantero Luiz Henrique.
Raphinha intentó animar a la afición desde el primer minuto . La respuesta no fue la esperada, ni siquiera con la energía del espectáculo de Ivete Sangalo previo al partido. La afición no estorbó, pero tampoco ayudó. El equipo controló el partido, pero no fue muy emocionante. Fue una calle de doble sentido.
Mientras tanto, Carlo Ancelotti, como de costumbre, guió al equipo con pocas palabras y gestos. A veces con las manos a la espalda, a veces con los bolsillos. Ni siquiera celebró el gol de Casemiro (que fue correctamente anulado por fuera de juego). El entrenador habló principalmente con Marquinhos y Gabriel Magalhães, quienes transmitieron el mensaje.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
La afición del Maracaná no despertó hasta el minuto 35, con un disparo de Wesley, seguido del regate de Raphinha ante Vizente Pizarro. El gol de Estevão se produjo tras una potente jugada a tres bandas entre Douglas Santos, João Pedro y Raphinha.
Los aplausos al final de la primera parte no fueron unánimes, pero el saludo en el descanso indicó que la afición estaba aparentemente satisfecha.
Pero apenas 10 minutos después del inicio de la segunda parte, la grada ya pedía la entrada de Luiz Henrique, ex del Botafogo , quien se había quedado fuera de la primera convocatoria de Ancelotti. El técnico no tardó en incorporarlo, junto con Andrey Santos. Estêvão se marchó entre una ovación de pie.
Después llegaron Kaio Jorge y Lucas Paquetá, jugadores que el entrenador aún no conocía. Luiz Henrique mostró su talento y Paquetá remató de cabeza. Uno anotó, pero la afición coreó el nombre del otro con más fuerza.
La escena se repitió con el tercer gol de Brasil . Luiz Henrique inició la jugada, dio en el larguero y Bruno Guimarães la empujó al fondo de la red. Una vez más, el ahora delantero del Zenit recibió una ovación de pie. Hubo tiempo antes del pitido final para gritos de «olé», y después del partido, más aplausos. Los jugadores se aseguraron de dar una vuelta al Maracaná para corresponder.
La última vez que se enfrentaron a Chile en el Maracaná, antes del partido del jueves, Brasil ganó 4-0 y deleitó a la afición. Ese fue el último partido en casa del equipo antes del Mundial de Catar . El equipo del entrenador Carlo Ancelotti no volverá a jugar en el país hasta el Mundial de 2026.
Los jugadores de la selección brasileña regresarán a la Granja Comary en Teresópolis el próximo sábado. La delegación viaja a Bolivia el lunes, y el partido contra la selección boliviana está programado para el martes en el Estadio Municipal de El Alto a las 20:30 (hora de Brasilia).