El Tribunal Constitucional Plurinacional sentó jurisprudencia al ratificar que su declaración a través de una ley municipal “no invade competencias del nivel central del Estado”.
Fuente: Visión 360
El municipio de Alto Beni informó que el Tribunal Constitucional declaró constitucional su declaración como “municipio agroecológico y libre de actividad y contaminación minera”, debido a que la ley 097, emitida por este gobierno autónomo, es una “norma declarativa, coherente con la autoidentificación de Alto Beni, prevista en su carta orgánica”, además expresa su voluntad de proteger a la Madre Tierra en su jurisdicción.
La sentencia constitucional SCP 0097/2024 del Tribunal Constitucional Plurinacional “resolvió el conflicto de competencias promovido por la Presidencia de la Asamblea Legislativa Plurinacional”, señala un comunicado emitido por el municipio de Alto Beni, esto debido a que esta instancia, representada por su presidente David Choquehuanca, había pedido la nulidad de cuatro de los seis artículos de la ley municipal.
Según el portal Sumando Voces, la sentencia le dio la razón a Alto Beni en tres de esos artículos y a Choquehuanca en uno.
=> Recibir por Whatsapp las noticias destacadas
El primer punto de la sentencia señala que “La Sala Plena del Tribunal Constitucional Plurinacional (…) resuelve declarar: COMPETENTE al Concejo Municipal del Gobierno Autónomo Municipal de Alto Beni, sobre la titularidad de la facultad legislativa referida a las competencias exclusivas de preservar, conservar y contribuir a la protección del medio ambiente y recursos naturales, fauna silvestre y animales domésticos (…) y en consecuencia se declara válidos los artículos primero, segundo y sexto de la Ley Municipal Autónoma 097”.
«El Tribunal Constitucional ha reconocido la autonomía del municipio de Alto Beni a través de esta sentencia, ahora nosotros podemos llevar adelante ese tipo de políticas pensando en el cuidado del medioambiente y nuestros productos agroecológicos», señaló la presidenta del Consejo Municipal, Nancy Chambi Cerezo, según el comunicado difundido por el municipio.
Sin embargo, el segundo punto de la sentencia del TCP declara “competente a la Asamblea Legislativa Plurinacional” sobre la legislación en torno a la política general de Biodiversidad y Medio Ambiente, “y en consecuencia declara nulo el artículo tercero de la Ley Municipal Autonómica 097” que en su redacción señalaba que el municipio podía realizar estrategias y políticas de monitoreo, control y desarticulación de toda actividad minera, que atente y contamine el medio ambiente, ya sea sus suelos, aguas, fauna, flora y pesca.
Jurisprudencia
Con esta sentencia, emitida en junio, pero notificada el 29 de agosto, el Gobierno de Alto Beni publicó que, “el TCP fortalece el derecho de los municipios a orientar su modelo de desarrollo y a definir límites democráticos frente a actividades que comprometan su territorio, su economía y su salud ambiental. Por lo que, el ejercicio de competencias del nivel central debe articularse con la decisión autónoma municipal en cuanto a su vocación productiva. La experiencia de Alto Beni marca un camino para que otros municipios del país, en diálogo con sus comunidades, adopten instrumentos de protección ambiental que expresen su proyecto colectivo acorde a sus realidades productivas y culturales”.
En una visita que realizó Visión 360 a este municipio, conoció el centro Sara Ana, un sitio de referencia internacional, donde se realizan ensayos en parcelas productivas de cacao, se producen semillas y se enseña a agricultores, estudiantes, profesionales y has a autoridades de Bolivia y de otros países, sobre los beneficios de la agroecología.
Su alcalde, Beltrán Marqués Sandoval, contó entonces cómo hace 16 años se originó el proyecto del municipio agroforestal, desde el asentamiento de los migrantes en la región, hasta la lucha y expulsión de las empresas mineras que quisieron asentarse en las orillas de sus ríos.
Ahí surgió el conflicto con el Gobierno, que quiso autorizar la explotación y búsqueda de oro en sus afluentes, por lo que, en dos ocasiones, los productores y toda la población intervinieron y desalojaron a quienes quisieron asentarse en la región.
En Alto Beni la principal actividad es la producción de alimentos ecológicos como plátano, yuca, cítricos, entre otras frutas y productos agrícolas, que nutren al mercado paceño.
También concentra a 48 cooperativas de cacaoteros que forman parte de El Ceibo, una iniciativa reconocida internacionalmente por su producción de cacao orgánico de alta calidad y que ha logrado desarrollar toda una cadena productiva hasta la elaboración de chocolates, con importantes iniciativas, como el fomento a la formación, el constante monitoreo de la calidad de productos, la implementación de los sistemas agroforestales, es decir, que siembren y protejan los árboles y otras especies en sus cultivos, para nutrir la tierra y eliminar actividades negativas, como los chaqueos o quemas.