Según el Ministerio Público de Río de Janeiro, la organización criminal definió que las figuras de mando deben permanecer en grandes complejos, como Penha y Alemão

Personas retiran piezas útiles de un auto incendiado usado como barricada por presuntos narcotraficantes durante un operativo policial en la favela Complexo do Alemao, donde opera la organización criminal Comando Vermelho, en Río de Janeiro, el martes 28 de octubre de 2025 (Foto AP/Silvia Izquierdo)
Fuente: infobae.com
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La reciente operación de las fuerzas de seguridad de Río de Janeiro, que se saldó con al menos 132 muertos, dejó al descubierto la estrategia del Comando Vermelho para ocultar a sus principales líderes en favelas fortificadas, y protegidas por armamento pesado y barricadas.
Según información difundida por el Ministerio Público de Río de Janeiro (MPRJ), la organización criminal definió que las figuras de mando deben permanecer en grandes complejos, como Penha y Alemão, blancos de la megaoperación del martes pasado.
El reporte de la Fiscalía precisa que estos espacios funcionan como auténticos bastiones y ofrecen refugio tanto a líderes de comunidades locales como a criminales llegados de otros estados de Brasil.
Las comunidades de Salgueiro, en São Gonçalo; y Rocinha, en la zona sur de la ciudad, también figuran entre los puntos estratégicos donde, según los fiscales, las cúspides del grupo encuentran protección. Una de las claves identificadas por el Ministerio Público es la presencia de “pesado armamento y barricadas”, elementos que dificultan el ingreso de las autoridades.
Armas de distinto calibre incautadas en el operativo policial (REUTERS/Tita Barros)
Entre los nombres destacados aparece el de Daniel Afonso de Andrade, alias «Danado“, señalado como el líder del Morro Jorge Turco, en Rocha Miranda, en la zona norte de la ciudad. De acuerdo a la denuncia judicial, “está oculto en el Complejo de la Penha, la principal base del Comando Vermelho, donde rinde cuentas a los líderes locales, recauda grandes sumas de dinero en efectivo y presenta una contabilidad detallada con la venta de abundante material estupefaciente”.
El Complejo de la Penha también acoge a traficantes originarios de la Baixada Fluminense, como José Severino da Silva Junior, conocido como «Jetta“ o ”Soró“, quien tiene 31 antecedentes penales y comanda los morros de Castelar y Palmeirinha, en Belford Roxo.
Imágenes de la Policía mostraron a narcos armados antes de la operación
Otro de los líderes que se refugia en la zona es Thiago Barbosa Conrado, apodado «Taz» o «TH do Rasta“, jefe de la comunidad Rasta en Duque de Caxias, con 53 antecedentes por homicidio, robo y tráfico de drogas.
Ambos ejercen funciones similares: presentan la contabilidad de las actividades criminales bajo su control ante las jefaturas alojadas en el complejo.

Efectivos policiales tras el megaoperativo del martes pasado en Río de Janeiro (Europa Press)
La última megaoperación de las fuerzas públicas derivó en la detención de 113 sospechosos. El Ministerio Público de Río precisó que uno de cada tres detenidos, es decir, 33 personas equivalentes al 29% del total, estaban identificadas como provenientes de fuera del estado de Río de Janeiro, incluidos individuos oriundos de Bahía, Pernambuco y Pará.
En ese contexto, sobresale la figura de Eduardo Lisboa de Freitas, apodado «Du Mec“, a quien el Ministerio Público señala como gerente del tráfico en el Complejo de la Penha. De acuerdo al informe, su función abarca desde la gestión de la seguridad en los puntos de venta de droga hasta la intermediación para que traficantes de otros estados puedan instalarse en el enclave. “Intermedia la llegada de traficantes de otros entes federativos”, puntualizó el documento.
Diversas fuentes coinciden en que las favelas fortificadas representan uno de los mayores obstáculos para el combate al crimen organizado en Río de Janeiro.
Los grandes complejos permiten a los líderes del Comando Vermelho consolidar sus operaciones, dificultar la acción policial y coordinar actividades criminales a gran escala, mientras permanecen al resguardo de operativos e intentos de captura.