Fuente: Visión 360
La Empresa Boliviana de Alimentos y Derivados (EBA) suspendió temporalmente el acopio de leche en San Lorenzo, Tarija, afectando a más de 140 pequeños productores que ya no cuentan con un destino para cerca de 7.000 litros diarios. Esta situación representa pérdidas superiores a 32.000 bolivianos por día, por lo que el sector se declaró en emergencia y exige el cumplimiento de un acuerdo previamente firmado.
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Según reportó el matutino tarijeño El País, la decisión fue comunicada oficialmente mediante una nota firmada por el gerente general de EBA, Javier Freire Bustos, quien justificó la medida debido a la “coyuntura nacional adversa”, atribuida a la escasez de carburantes, que estaría afectando el transporte de productos desde la planta procesadora hasta los mercados.
Asimismo, mencionó que la falta de combustibles limita la distribución, lo que a su vez genera el riesgo de acumulación de inventarios en planta, algo fatal tratándose de productos perecederos que requieren estrictas condiciones de conservación y rotación.
Freire también señaló otros factores, como la demora en la importación de envases por la falta de divisas, retrasos en los pagos de los gobiernos municipales por los productos destinados al desayuno escolar, entre otros.
Los productores del valle de San Lorenzo abastecen diariamente a EBA con leche fresca, y la medida causa un enorme perjuicio. “Somos 140 productores los que estamos siendo afectados. Muchos asumimos préstamos para mejorar la producción, compramos vacas y trabajamos con genética, cumpliendo todos los compromisos con el Gobierno. Y ahora, de un día para otro, nos dejan sin dónde entregar la leche”, lamentó Waldo Gamual, presidente de la Asociación de Productores Lecheros de San Lorenzo.
Para Gamual, la medida es una señal de mala administración de EBA a nivel nacional. Advirtió que la falta de planificación pone en riesgo la sostenibilidad de los pequeños productores que dependen del acopio diario. “Rechazamos categóricamente esta decisión. Está haciendo daño al sector productivo de San Lorenzo y al esfuerzo de las familias que viven de la leche”.
Los productores aseguran que buscarán alternativas inmediatas, pero el panorama no es alentador. La Planta Industrializadora de Leche (PIL), que opera en el departamento, ya tiene sus cupos de recepción completos, por lo que absorber el excedente sería prácticamente imposible.