
Fuente: https://actualidad.rt.com
Un grupo de altos funcionarios estadounidenses leales al presidente Donald Trump lo ayudaría a tomar represalias contra sus rivales políticos dentro del Gobierno federal, reporta Reuters citando fuentes familiarizadas con el asunto.
La iniciativa formaría parte de una orden ejecutiva emitida por Trump que busca identificar y corregir conductas consideradas indebidas, vinculadas al uso de las fuerzas del orden y la comunidad de inteligencia como armas políticas.
Varios funcionarios consultados por la agencia confirmaron que el mecanismo de investigación habría sido activado mediante la fiscal general Pam Bondi y la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard.
Según el informe, ambas funcionarias habrían ordenado la creación de grupos internos en sus departamentos para «erradicar» a aquellos que hicieron un uso indebido del poder gubernamental contra el mandatario. La misión del grupo interinstitucional es «básicamente perseguir al Estado profundo», afirmó una fuente.
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Aunque un alto funcionario de la Casa Blanca señaló que estos mecanismos no son «nada nuevo» en las estrategias de Trump, la presencia del grupo interinstitucional indica que la presión del mandatario sobre sus opositores es más amplia y sistemática.
Estos grupos utilizarían el término «armamentización» como justificación para iniciar indagaciones contra quienes actuaron en contra del presidente. Las medidas implementadas son interdisciplinarias y buscan combatir al llamado Estado profundo, término con el que Trump se refiere a funcionarios opositores de las administraciones de Joe Biden y Barack Obama.
Las investigaciones se concentran en quienes en algún momento emprendieron acciones contra Trump, particularmente en los promotores de sus dos juicios políticos y en los difusores del escándalo sobre la supuesta interferencia rusa en las elecciones de 2016, una teoría ya desacreditada y que Moscú negaba desde el inicio.